Belén Rueda y Juan Antonio Bayona presentan El Orfanato en el Festival de Cine Nueva York que tanto impulsó a Almodóvar.
29 sep 2007 . Actualizado a las 12:40 h.Lincoln Center. Abre el Festival de Cine de Nueva York con una película española, a la vez que se da el pistoletazo de salida a la carrera por los Oscar. ¿Almodóvar? Nooo, Juan Antonio Bayona.
Who?, se preguntan los americanos. La ignorancia está justificada, porque El orfanato, que hoy se estrenaba en la primera jornada de la 45 Edición del Festival de Cine de Nueva York, es el primer largometraje de este director catalán de 32 años. Y un novato como él se ha llevado el gato al agua para representar a España en la carrera por los Oscar, superando a veteranos como José Luis Garci o Emilio Martínez Lázaro, antes incluso de que se estrene en nuestro país el próximo día 11.
A la ovación de Cannes y Toronto se suma ahora la de Nueva York, y seguramente la semana que viene Sitges. Tanta es la emoción con una película cuyo caserón lleno de fantasmas recuerda a otro director que huele a Oscar, Alejandro Amenábar con Los Otros, que ya hoy había periodistas que preguntaban a Belén Rueda qué hará si la nominan para el Oscar a la Mejor Actriz. «¡Nooo! ¡Me muero!», decía espontánea. «¡Pues ya quisiera Nicole Kidman»!, se oía comentar a sus espaldas, sin que ella saliera de su asombro.
«Te aseguro que no me lo esperaba, me ha sorprendido mucho y estoy un poco sobrepasada, la verdad», confesaba. ¿De verdad, de verdad que no se lo esperaba? «Pues sí, de verdad, porque es un director novel, mucha gente de la que ha participado en el equipo técnico era su primera película como jefes de equipo -el director de fotografía, sonido, montaje, música-, y eso te da la sensación de que es algo muy familiar, que hay muchísima ilusión, pero que no va a estar demasiado apoyado».
A Bayona la noticia le había cogido cantando a las tres de la mañana Hey Jude en un karaoke de Austin, donde presentaba la película en el Festival de Cine Fantástico de Texas, y no parecía haber salido de la nube todavía. «Todo lo que está viniendo, donde estamos ahora mismo, yo nunca me hubiera imaginado llegar hasta aquí», tartamudeaba. «Todo lo que venga es bienvenido, porque nunca pensamos que llegaríamos hasta aquí».
Para ayudarle a seguir subiendo tendrá detrás a Picture House, la misma distribuidora que el año pasado llevase hasta los Oscar El Laberinto del Fauno, dispuesta a hacer otra apuesta por la cinta que se estrena en Estados Unidos de forma limitada el 28 de diciembre, con la promesa de no quedar en una inocentada, porque en dos semanas se ampliará su presencia «a una cantidad bastante grande de cines» que no se ha especificado, aunque se habla de mil salas. «Es muy importante tener un socio fuerte en esta empresa, y Picture House en ese sentido es el mejor que podíamos tener», decía Bayona.
Un padrino como Guillermo del Toro, productor ejecutivo de El Orfanato, también ayuda, así como que pueda verla el público neoyorquino, donde gente de la industria con derecho a voto. Aún así, Richard Peña, director del festival, advierte que «la gente que vota más para los Oscar son jubilados, y no sé si esta película de género será el tipo de película para gente mayor».