Tutankamón, por fin al descubierto

Susana Samhan

CULTURA

Hasta ahora, solo 55 expertos habían podido ver la cara del faraón más famoso desde su descubrimiento en 1922

05 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

El faraón Tutankamón mostró ayer su cara por primera vez en la historia ante una multitud de periodistas después de que su momia fuera trasladada de su sarcófago a una urna transparente. Desde su nueva ubicación en una vitrina de plexiglás, el faraón más famoso del mundo pudo lucir su rostro ante la nube de fotógrafos y cámaras de televisión apelotonados en el interior de su tumba, situada en el Valle de los Reyes (Luxor), en el sur de Egipto.

La momia de Tutankamón tiene la nariz aplastada, los dientes pronunciados y el rostro ennegrecido, que resalta sobre el sudario de lino con el que se ha envuelto su cuerpo enjuto para protegerlo. «Con la colocación de la momia en la vitrina, mandamos al rey dorado a la vida eterna», dijo poético Zahi Hawas, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades que hizo de maestro de ceremonias durante el traslado.

«La momia estaba amenazada con quedar reducida a polvo por el aumento de la humedad debido a los visitantes», añadió Hawas. En su nueva ubicación, la momia estará preservada del calor, la humedad y el polvo a los que estaba expuesta en el interior del sarcófago. Tutankamón lució cara y estrenó atuendo y ubicación nuevos cuando justo se cumple el 85.º aniversario del descubrimiento de su tumba por el británico Howard Carter, a quien Hawas no dedicó precisamente elogios.

Según el egipcio, Carter empleó hierros y manipuló de forma descuidada la momia para separarla de su máscara y retirarle, así, los 150 amuletos que portaba.

El resultado fue que el cuerpo quedó dividido en 18 partes y que la momia quedó en tan mal estado que no pudo ser sacada de su tumba, apuntó Hawas durante el traslado, televisado simultáneamente por las cadenas estadounidenses Discovery Channel y National Geographic.

Hasta ahora, solo 55 personas, incluido el propio Hawas, la mayoría expertos en egiptología, habían podido ver la cara a la momia desde su descubrimiento en 1922.

Se coló un turista

Aunque en principio estaba vetada la entrada a los turistas, que a partir de hoy tendrán la oportunidad de contemplar el rostro de la momia in situ, el parisino Michel Dennis pudo colarse junto a tres de sus hijos en medio de la confusión originada por el revuelo mediático. «Es fantástico, impresionante; desde luego mucho más impactante ver una momia en su tumba original que expuesta en los museos», afirmó Dennis, convertido en el primer turista que ve la cara del faraón niño.

«Es un chico guapo, con una hermosa sonrisa y dientes prominentes», dijo a los periodistas el director del Valle de los Reyes, Mustafá Wazary, poco antes de mostrar el cuerpo embalsamado.

Tras quedar descubierta la cara de Tutankamón, ya solo quedan dos incógnitas que contribuyen a su popularidad: la veracidad o no de su maldición, que supuestamente recae sobre todo aquel que profane su tumba, y los motivos de su muerte. Hawas se mostró hoy a favor de las teorías que apuntan a que murió a causa de un accidente, «bien porque se cayó de un carro o bien en una batalla».

Parte de la celebridad de este faraón se debe al hallazgo de un gran tesoro en su tumba. La máscara que cubría el rostro de Tutankamón pesaba 11 kilos y estaba realizada en oro macizo con incrustaciones de piedras semipreciosas.