Las actrices estrenan «El destino de Nunik», historia que rememora el genocidio armenio durante la I Guerra Mundial.
26 dic 2007 . Actualizado a las 20:55 h.Paz Vega y Angela Molina muestran su aspecto más dramático en 'El destino de Nunik', coproducción europea dirigida por los hermanos Taviani que recuerda el genocidio y éxodo del pueblo armenio durante la I Guerra Mundial. El motivo era presentar este drama que, tras exhibirse fuera de competición en la Berlinale e inaugurar el Festival de Cine Europeo de Sevilla, se instala en las pantallas españolas el próximo viernes, pero el encuentro de estas dos generaciones de actrices con los medios no empezó bien.
Un retraso de cuarenta minutos provocó el malestar de fotógrafos y cámaras que amenazaron con plantar a Vega y Molina, perola sangre no llegó al río y hubo fotos e imágenes para todos. Minutos después, la sevillana, de 31 años, y la madrileña, de 52, comparecieron ante los plumillas y uno de los cámaras volvió a recriminarlas la demora, lo que provocó que Vega protagonizase un amago de plante. «Ya nos hemos disculpado varias veces. Es que dan ganas de irse», expresó la actriz, que, incluso, se levantó de la silla dispuesta a abandonar la sala. Al final, se impuso el sentido común y la rueda de prensa se celebró sin más sobresaltos.
Sin reparos en reconocer que no sabía nada de este genocidio, uno de los más olvidados, Paz Vega aceptó protagonizar esta producción «para descubrir esta catástrofe histórica y trabajar con los Taviani. Es una suerte poner un granito de arena para dar a conocer lo que pasó. Yo no tenía ni idea porque nunca se estudia en los libros de Historia. Cuando leí el guión, me conmovió y durante el rodaje viví todo tipo de emociones», declaró la protagonista de 'Lucía y el sexo' que, desde que hizo 'Splanglish', es reclamada por los norteamericanos.
Paolo y Vittorio Taviani querían a Vega encabezando el reparto de esta historia sobre una familia armenia en la Turquía de 1915 basada en la novela de Antonia Arslan 'La masseria delle allodolee'. «Ellos lo tenían muy claro en el viaje que hice a Roma para comer con ellos. Los Taviani son muy distintos, pero todo concuerda. Me llamó mucho la atención su sentido del humor, su energía y lo relajados que siempre están. Claro, como tienen tanta experiencia...», apuntó la Teresa de Jesús cinematográfica de Ray Loriga, para quien este filme demuestra «que armenios y turcos son víctimas de la guerra, no hay vencedores ni vencidos».
Instalada en Estados Unidos con su marido Orson y su pequeño hijo, que se llama como su progenitor, Vega está abierta a proyectos «que me interesen» en España, pero su objetivo es EE.UU, donde, según sus palabras, le va muy bien. De hecho, en cuatro meses ha rodado tres películas -'The Spirit', de Frank Miller; 'The Human Contract', ópera prima de Jada Pinkett Smith, esposa de Will Smith; y 'Las seis mujeres de Henry Lefay', junto al cómico Tim Allen-, y el próximo 14 de enero inicia en Nuevo México la filmación del thriller 'No Forgotten'.
Una «obligación»
Con la paz que le caracteriza, Angela Molina entiende que es una «obligación histórica» hacer películas como 'El destino de Nunik', «Se tiende a no pensar en esas partes de la Historia tan opacas para no sufrir. Refrescar la memoria en este momento tan complicado en el mundo tiene mucho valor porque es arriesgado. Los Taviani se han implicado para mover conciencias y, siendo unos poetas del cine, entiendes perfectamente lo hagan. 'El destino...' es su última carta de amor al celuloide, a la cultura y a la humanidad», apunta la veterana actriz.
La hija de Antonio Molina echó de menos a los autores de 'La noche de San Lorenzo' y 'Padre padrone' en la presentación de este título sobre una guerra que aún hoy es ignorada por las autoridades de Turquía, un genocidio contra la población armenia que costó la vida a más de un millón de personas. «Cuando la guerra toma cuerpo con la realidad, nos hiere. En el filme había muchos actores armenios que nos arrastraban a la realidad, al sufrimiento de su pueblo. Los directores han sido muy delicados con el tema porque no han sido explícitos a la hora de mostrar el terror», describió la intérprete de 'Demonios en el jardín' y 'Las cosas del querer'.
Tras superar una pequeña polémica sobre si era o no la primera película que tenía como asunto central este genocido, Molina alabó a los Taviani, a los que ve con «personalidades muy diferentes que se acoplan a la perfección. Vittorio tiene esa pasión...Y Paolo es el poeta», dijo la que fue para Buñuel 'Ese oscuro objeto de deseo'.
Con los pies en el presente, Angela Molina no desveló ninguno de los muchos proyectos que tiene en la agenda, sólo indicó que en estos momentos estaba haciendo un filme con Giusepe Tornatore en Sicilia en el que, por primera vez, encarnaba a una abuela.