El Gobierno ha solicitado a la UNESCO que la dieta mediterránea sea considerada patrimonio de la humanidad.
23 sep 2008 . Actualizado a las 18:38 h.El Gobierno deberá promover cuantas acciones estén en su mano para declarar la cocina y la gastronomía de «las nacionalidades y regiones» de España parte fundamental del patrimonio cultural del país, según la proposición no de ley que hoy ha aprobado por unanimidad la Comisión de Cultura del Congreso.
La proposición reclama al Gobierno que apoye las acciones impulsadas por las administraciones autonómicas para la conservación y vigencia del patrimonio gastronómico cultural, así como su difusión a nivel internacional, según informa en una nota el PSOE, grupo proponente.
En el texto aprobado se le pide que facilite la cooperación y coordinación con las diferentes administraciones, con el objetivo de «preservar, actualizar y desarrollar» el patrimonio gastronómico-cultural y que difunda los aspectos más positivos de la alimentación, la cocina y la gastronomía españolas en el mundo.
La iniciativa, precisa el grupo socialista, está impulsada por la Academia Española de Gastronomía y está respaldada por el ministro de Cultura, César Antonio Molina.
En su intervención en la Comisión, el portavoz socialista de Cultura, Rafael Simancas, ha subrayado que los españoles se pueden sentir «orgullosos» de esa parte «extraordinaria» del patrimonio colectivo español.
Según Simancas, España es «la primera potencia en el mundo», tiene «al mejor cocinero del mundo, a la mejor cocinera del mundo» y el presidente de honor de la Academia Internacional de Gastronomía es español.
Finalmente, el portavoz socialista ha recordado que ya ha habido un reconocimiento de la cocina y gastronomía europea como patrimonio cultural común por parte de la Comisión Europea, y el Gobierno de España ha solicitado a la UNESCO que la dieta mediterránea sea considerada patrimonio de la humanidad.
La Comisión de Cultura ha aprobado, también por unanimidad, la declaración de 2009 como Año Ferrer i Guarda en el Estado español, y que se redefina el Plan Nacional de Arqueología Subacuática, mientras que la propuesta del PP de transformar la actual Fundación María Zambrano en un Centro Internacional para la Igualdad de Género se ha retirado.