El talento artístico hace cumbre en A Coruña

Rubén Ventureira

CULTURA

El actor Antonio Banderas, la cantante Luz Casal y el torero José Tomás recibieron atronadoras ovaciones

16 oct 2008 . Actualizado a las 19:27 h.

Desde su apertura en 1948, el Teatro Colón jamás había reunido tanto talento artístico. Y, posiblemente, lo dicho se puede extender a la historia de A Coruña. Para medir el nivel de la cita basta imaginar una película basada en un guión de Jorge Semprún, dirigida por Manoel de Oliveira, con música de Luz Casal, coreografías de Alicia Alonso, vestuario de Roberto Verino y protagonizada por Antonio Banderas y Marisa Paredes. Pues todos ellos, y otros ocho artistas de su talla, pisaron ayer las tablas del teatro coruñés para recibir las Medallas de Oro al Mérito en las Bellas Artes, también concedidas a cuatro colectivos.

Dijo el Rey en el discurso que cerró el acto que los distinguidos han hecho realidad «el anhelo de perfección», el «ir siempre más lejos, más lejos», que defendía Picasso, a cuya etapa coruñesa aludieron el ministro Molina y el alcalde coruñés durante sus intervenciones. A juicio de don Juan Carlos, el trabajo de los medallistas «contribuye a construir un mundo mejor, un mundo de libertad, de compromiso y de belleza, que potencia nuestra propia existencia y promueve nuestras Bellas Artes». Añadió el monarca que «Galicia y A Coruña estructuran un excelente marco» para la ceremonia «por su capacidad creativa». La prueba de ese talento gallego mentado por el Rey era la presencia en las butacas reservadas a los premiados de Roberto Verino, Luz Casal y Antonio Pereira, presidente de la Asociación Oleira de Buño.

Sonríe Tomás

Los condecorados aguardaron sentados la puntual llegada de los Reyes al recinto. En esos minutos previos, las actrices Marisa Paredes y Berta Riaza arrancaron unas cuantas sonrisas al habitualmente circunspecto José Tomás, el «torero de la mística», como lo definió después Molina. De lo sana que es la risa sabe mucho la mujer que estaba sentada delante de ellos, Paulina Andreu, pues no en vano es hija de Charlie Rivel. Mientras, Antonio Banderas realizaba su despliegue de gestos habitual durante una charla con el director de cine y productor Antonio Isasi. Desde el patio de butacas, Melanie Griffith fotografiaba a su expresivo esposo con una cámara digital.

Momentos emotivos

Ya con los Reyes en la sala, el himno de España precedió a la ceremonia entrega de medallas, rica en momentos emotivos. Lo fueron las ovaciones atronadoras recibidas por Luz Casal, Antonio Banderas y José Tomás. Pero, sobre todo, conmovió la ruptura del protocolo realizada por los Reyes en la entrega de los premios a la bailarina Alicia Alonso y al historiador Emilio Pérez Sánchez. Ante las dificultades de la primera para avanzar caminando, el Rey abandonó la mesa presidencial para entregar a la bailarina el diploma y la medalla. Ambos se acercaron al lugar ocupado por Pérez Sánchez, ex director del Museo del Prado que se mueve en silla de ruedas.

Banderas habló en nombre de los homenajeados. Pidió que en estos «tiempos confusos y violentos» el arte sea utilizado como «un elemento integrador y de tolerancia». Lanzó un consejo a los que empiezan: «Huyan de los especuladores de la fama y del éxito fácil».

«Inutilidad» del arte

A continuación, el ministro César Antonio Molina trazó una semblanza de estos y del resto de los condecorados, incluidos los ausentes, que fueron el director de orquesta argentino Daniel Barenboim, la mezzosoprano italiana Cecilia Bartoli y la pianista portuguesa Maria João Pires. Los compromisos profesionales impidieron su presencia en Galicia. Molina elogió «la «entrega a la inutilidad indispensable del arte» de los protagonistas del acto, capaces de «transformar la realidad».

En la ceremonia también intervinieron el alcalde de la ciudad, Javier Losada, y el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño. El primero instó a los premiados a que se conviertan en «embajadores de A Coruña» y les deseó que «la luz de nuestro faro ilumine» su obra. El segundo tuvo un recuerdo para Ramiro Fonte, fallecido la pasada semana.