La sala El Sol, una de las referencias de la movida madrileña, cumple treinta años de existencia
CULTURA
La emblemática sala El Sol, una de las cunas de la movida madrileña, situada en el número 3 de la céntrica calle de Jardines, cumple treinta años, un período durante el que se han celebrado en el local cerca de siete mil conciertos y por cuyo escenario han pasado Moby, The Strokes, Amaral, Alaska, Los Secretos o Alanis Morissette.
Fue en 1979 cuando el arquitecto Antonio Gastón, un enamorado del arte y la música, puso en marcha la sala, y un grupo que comenzaba a hacer sus pinitos y que ahora ha vuelto a la carretera, Nacha Pop, el que inauguró su angosto escenario, según ha explicado el actual gerente del establecimiento, Nacho Moreno.
El Sol «ha sido, es y será un espacio plural, un escenario abierto a todo tipo de manifestación cultural y un lugar de encuentro de varias generaciones, pero además se ha mantenido como una sala independiente, no dirigida por las modas y lo comercial», asegura Moreno, que trabaja en ella desde su apertura.
La sala «no ha cambiado en nada, tiene más arrugas, pero también gasta un estupendo aire acondicionado, ya no se sufren aquellos calores de entonces», y el público, «aunque mantiene a sus fieles, tiene una media que oscila entre los 26 y 28 años, o sea, que no es un lugar para adolescentes». Por su escenario, donde han nacido bandas como La Unión, Radio Futura o Alaska y los Pegamoides, han pasado músicos de lo más variopinto del pop y el rock nacional e internacional, nombres como los de Mamá (1979), Aviador Dro, Las Chinas, La Orquesta Mondragón, Los Secretos (1980), Seguridad Social (1984), 21 Japonesas, Antonio Vega (1992) o Amancio Prada, Bustamante, Javier Ruibal, Suburbano (1993).
También han actuado Carlos Ann, Jaime Urrutia, Pereza, El canto del loco, Astrud, Julieta Venegas, Glutamato Ye Ye, SDFK, Sunflowers y Andy Chango, entre otros muchos.