«Es el momento de recordar mi carrera artística en homenaje a mi padre, a mi madre y a mi hermano»

C. P.

CULTURA

25 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Lolita Flores estrenará el día 30 en el Teatro Colón, de A Coruña, el espectáculo con el que celebra sus 33 años de carrera artística. De Lolita a Lola es un montaje con el que la hija de Lola Flores y Antonio González, el Pescaílla, rinde homenaje a sus padres y a su hermano. Protagonizará durante hora y media un espectáculo dirigido por Víctor Conde que rompe con el formato convencional de concierto para combinar sus grandes éxitos como cantante con el teatro, la danza y el audiovisual.

-¿Por qué celebra 33 años de carrera artística y no una cifra más redonda?

-Porque es ahora cuando tengo ganas de hacerlo, y estas cosas tienes que hacerlas así, cuando es el momento. Pero es que, además, el 33 es mi número. Mi hermano Antonio tenía 33 años cuando murió, Jesucristo también murió a los 33 y el 33 es mi número en la ruleta, que no es que juegue mucho, pero cuando lo hice me dio suerte.

-¿Qué objetivos se marca?

-Que la gente me conozca más, enseñarle al público tal como soy, lo que hago. Tengo mucha esperanza, porque cuando salgo en la tele la audiencia sube un pelín. No sé cómo agradecer ese cariño, no tendría palabras para dar las gracias. Por eso, en este espectáculo, canto todo tipo de canciones en un repaso musical en el que cambio de vestuario tres veces, con un homenaje a mi madre en la segunda parte y alguna sorpresa en vídeo.

-¿El espectáculo, que conjuga todas sus facetas, marca un antes y un después?

-Abre muchas expectativas, pero el montaje es un recorrido por toda mi carrera, desde que empecé a cantar baladas, el paso por la copla y el rock. Pero hay más cosas, porque yo toco muchos palos, he hecho casi de todo, desde teatro a cine, presentar en televisión y cantar, escribir y hasta pintar. Pero este montaje, más que a mi carrera, es un homenaje a los tres grandes pilares, que son mi padre, mi madre y mi hermano, y por este orden, porque con mi padre empecé cantando las baladas, mi madre fue fundamental para continuar, y la etapa del rock se la debo a mi hermano y sus canciones. Hasta que encontré mi propio estilo.

-Y un lugar artístico en el que el cine parece atraerle especialmente, ¿no es cierto?

-Me tienta mucho, sí, pero no me llaman. Lo último que he hecho fue El libro de las aguas , la película sobre la novela de Alejandro López Andrada que dirigió Giménez-Rico en la que trabajo con mi hija [Elena Furiase]. Es una gran película, pero el cine español nos lo quitan pronto de las salas comerciales, mientras que el americano nos lo comemos con patatas.

-¿Qué tipo de guión le gustaría que le ofrecieran?

-Podría interpretar cualquier papel, podría hacerlo. No me importaría cortarme el pelo, teñirme de rubio platino, engordar, adelgazar... Lo que fuera con tal de que sea un buen papel y, sobre todo, un buen director.