
Escribió el guión de la película basada en la novela de Clara Sánchez con el director Santiago Tabernero. Es también el protagonista de la historia junto a Marta Etura
21 ene 2014 . Actualizado a las 19:18 h.Santiago Tabernero y Eduardo Noriega son amigos desde hace tiempo. En una de sus muchas conversaciones sobre cine surgió la idea de escribir mano a mano un guión y la ocasión se presentó con la novela Presentimientos, de Clara Sánchez, de la que surgió la película que el actor cántabro también protagoniza, junto a Marta Etura y Alfonso Basave. «Santi fue el que me tendió la mano, y yo le dije que sí. Él es el valiente y yo el inconsciente», resume Noriega, que confiesa haberse sentido muy «arropado» en su debut como escritor, un proceso muy largo -casi tres años-, sin grandes presiones en cuanto a fecha o resultados. «Empezamos a escribir sin saber si iba a salir un guión, pensando que igual lo conseguíamos o igual no», explica el protagonista de Tesis, que reconoce que no siente una gran «pulsión» por escribir -«prefiero interpretar», apunta-, pero no le importaría repetir en «circunstancias parecidas».
La película, que se estrena el próximo fin de semana, cuenta la historia de Félix (Noriega) y Julia (Etura), una joven pareja de clase media que acaban de ser padres y cuya relación atraviesa un momento delicado, por lo que deciden irse unos días de vacaciones a la playa para «volverse a enamorar». Sin embargo, un accidente de tráfico les separa nada más llegar a su destino, y a partir de ahí comienza el verdadero viaje, una peregrinación entre el mundo real y el de los sueños, y la lucha por volver a reencontrarse.
«La novela de Clara Sánchez reúne muchas cosas que me entusiasman», explica Tabernero, procedente del mundo de la televisión y que afronta con este su segundo largometraje, después de Vida y color (2005). «Para empezar, una estructura de género muy sofisticada, con dos niveles de relato, uno realista y uno soñado, salpimentada de biografía de la pareja en forma de flashback», expone. También le enganchó el género, el suspense, pero sobre todo un tema que, asegura, le importa mucho: el amor y la pareja como unidad de convivencia. «Yo diría que, por encima de todo, Presentimientos es una gran historia de amor», opinó.
Da la casualidad de que para Noriega, la presentación de la película coincide con su inminente paternidad junto a su mujer, Trinidad Oteros, un tema del que prefiere no hablar públicamente. «Digamos que el entrenamiento en cambiar pañales me va a venir bien para dentro de unos meses», se limita a señalar antes de volver al personaje. «Nunca antes había hecho un trabajo tan extenso y profundo», señala, algo que confirman tanto Tabernero como sus compañeros de rodaje. «Cuando Eduardo se centró como intérprete y se olvidó de la trama general pudo hacerlo con una libertad y una generosidad que han llenado de veracidad al personaje», afirma el director.
Alfonso Basave, más conocido por su trabajo en series de televisión como Amar es para siempre o Hispania y que afronta uno de sus primeros papeles de peso en el cine, añade: «Yo llevo muy mal que me dirija un compañero, me encanta trabajar con él pero no que me diga qué hacer y Eduardo en el rodaje era un actor, no quería ser guionista». La pareja formada por Basave y Marta Etura lleva todo el peso de lo onírico en la película. «A mi personalmente me interesa mucho el mundo de lo irracional y los miedos, y atreverme a bucear en la oscuridad», dice el actor madrileño.
Etura comparte el entusiasmo por el mundo de los sueños, pero admite que lo que más le atrajo del proyecto fue la posibilidad de hacer un papel protagonista, algo que no se le presentaba desde La vida que te espera (2004), de Manuel Gutiérrez Aragón. «En esta industria hay muy pocos protagonistas femeninos», señala. «Yo he tenido la enorme suerte de no parar de trabajar desde que empecé, pero en el 90 % de las historias que me llegan los protagonistas son hombres, como si a las mujeres no nos pasasen cosas».