Durante años, Shigeru Miyamoto (Kioto, 1952) ha sido el cerebro detrás de popularísimos videojuegos -y sus personajes- como Super Mario, Donkey Kong o The Legend of Zelda. Ahora también debuta en el cine de animación con tres cortometrajes precisamente con personajes de videojuegos como protagonistas: los Pimkin. Sobre ellos giran las tres historias que Miyamoto presentó este fin de semana en el Festival Internacional de Cine de Tokio. Se trata de The Night Juicer, Treasures in a Bottle y Ocupational Hazards; todas ellas hacen uso de las técnicas 3D.
El éxito comercial de sus creaciones en el ámbito de los videojuegos propició que durante años Miyamoto haya rechazado sistemáticamente toda oferta de adaptaciones cinematográficas. Al final, decidió que si se hacía una película, mejor hacerla él mismo. El avance de los efectos fue lo que convenció a Miyamoto de que ya no había tanta diferencia a la hora de trabajar en un medio u otro. «Hace años el cine requería una serie de técnicas completamente distintas, pero ahora creo que son bastante similares», declaró. La chispa se le encendió precisamente en el cine, al ver un anuncio que conminaba a los espectadores a apagar sus móviles: los Pimkin podían ser sus protagonistas.
Del desarrollo de esa idea inicial en otras direcciones han salido los cortos, que pretenden ampliar la presencia de los personajes más allá de los videojuegos, una ocupación que Shigeru Miyamoto no tiene intención de abandonar.