La industria cinematográfica se adapta a la cultura local, el último ejemplo es «Inside Out»
30 ene 2015 . Actualizado a las 10:19 h.La nueva creación de Pixar ha sacado a la palestra un curioso aspecto del cine, las adaptaciones culturales de las películas con tirón internacional. Cuando la finalidad es que la gente empatice con los personajes de la película, se ría, se emocione... hay que tener en cuenta que la cultura puede ser muy diferente dependiendo de la localización, por lo que en algunas ocasiones es necesario adaptar ciertas escenas para que puedan ser entendidas por un público culturalmente distinto.
En Del Revés (Inside Out) Pixar ha tenido que reaccionar ante una de estas situaciones de diferencia cultural, y lo ha hecho cambiando el brócoli por pimiento para la versión japonesa. En la versión original de la película, la pequeña Riley protesta cuando su padre le da de comer brócoli, Asco toma los mandos de la cabeza de la pequeña y hace que la niña rechace las verduras. Para los niños japoneses lo más «asqueroso» es el pimiento, algo que dejaba bien claro Shin-Chan, y sin embargo comen mucho brócoli. Pixar apostó por la modificación de la escena en la versión japonesa para hacer más próxima la situación al público asiático.
Pero no hace falta irse hasta el continente asiático para encontrar este tipo de adaptaciones. En la versión europea y sudamericana de la misma película hay otro cambio cultural. En la escena en la que se ve que el padre de Riley está pensando en un partido de fútbol, en la versión original sin embargo es un partido de hockey. Aunque el concepto se habría entendido de la misma forma, se trata de adaptar la escena para hacerla más afín al público.
Encontramos otro ejemplo de adaptación cultural en la película Regreso al futuro, cuando la madre de Marty McFly se dirige a él como Calvin porque lee en su ropa interior interior Calvin Kein. En España todavía no era conocida la marca, y el guion fue adaptado sustituyéndola por la extendida Levi Strauss. En este caso la adaptación cultural respeta también la cultura de origen, ya que se elige otra marca americana para que no desentone ante el espectador.
En la tercera entrega de Piratas del Caribe: en el fin del mundo, también sufrió modificaciones. La participación de Chow Yun-Fat desató críticas en China por representar una visión negativa y estereotipada del país asiático y el papel del actor tuvo que ser modificado. Finalmente los veinte minutos en pantalla del actor chino se redujeron a diez para evitar las quejas del público asiático
Otra variante de adaptación es la de el texto escrito que aparece en pantalla. Normalmente se utilizan subtítulos para carteles, cartas, notas... ya que es la solución más rápida. Una excepción es la película de Marvel Capitán América: El soldado de invierno, en la escena en la que el personaje principal hace una lista de cosas que se ha perdido al estar congelado y con las que debe ponerse al día. Los guionistas decidieron elaborar diferentes listas dependiendo de la versión. Se mantienen en todas las listas la comida tailandesa, Star Wars, Star Trek, Nirvana, Rocky y la canción de Marvin Gaye. El resto varía en función del país, por ejemplo en la española añaden a Rafa Nadal, Héroes del Silencio, Camino José Cela, la Constitución de 1978 y el Chupa Chups. En Francia añaden Daft Punk y a Louis de Funes, así como en Reino Unido no podían faltar los Beatles y Sean Connery.
Está claro que la traducción del guion no lo es todo a la hora de distribuir una película de forma internacional, la comunicación intercultural implica una serie de cambios también escénicos y en las referencias. Se trata de hacer entender el mensaje fílmico al espectador, algo que no siempre es fácil en la versión original a pesar de la creciente globalización hollywoodiense.