Crítica de «13 horas: los soldados secretos de Bengasi»: Somos pocos y estamos rodeados

Miguel Anxo Fernández

CULTURA

Si aparcas tus escrúpulos cinéfilos y no haces ascos al «entertainment» bien facturado, «13 horas: los soldados secretos de Bengasi» te colmará

07 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Si como espectador aparcas tus escrúpulos cinéfilos y no haces ascos al entertainment bien facturado, te colmará 13 horas: los soldados secretos de Bengasi, sumándole la coartada de ser una historia real, detergente muy eficaz contra las piruetas más descaradas del guion. También conviene reconocer a Michael Bay que sabe rodar, aunque en su filmografía se haya colado la insufrible Transformers (en el 2017 saldrá la quinta entrega). Títulos como La roca (1996), La isla (2005) y Dolor y dinero (2013), con no ser redondos, le confirman como solvente en cuanto a cine de género. Esa solvencia luce aquí, en su película mejor redondeada, aunque no pueda evitar el tópico. Bengasi, 11 de septiembre del 2012. El consulado estadounidense va a ser asaltado durante varias horas, falleciendo su embajador. Media docena de efectivos encubiertos coordinarán la defensa mientras no se produce una respuesta aérea, que nunca llegará.

Como es natural, el incidente puso al descubierto lo ya sabido (la CIA y sus bases secretas), y provocó críticas sobre la poca seguridad de sus legaciones en el extranjero a la entonces secretaria de Estado de Obama, Hillary Clinton. Llegó a decirse que su estreno se había retrasado en Estados Unidos para perjudicar su campaña de las presidenciales. En fin? El guion, tomado del libro-reportaje de Mitchell Zuckoff, recrea aquellas horas en clave de acción a lo Black Hawk Derribado (Ridley Scott, 2001) y un tono a lo ocurrido en El Álamo, en el XIX, administrando el ritmo al mejor sello Bay, con algunas set pieces redondas, personajes bien trazados (aunque sin alardes) y un inevitable halo maniqueo, con los malos convertidos en turba informe y anónima que cae acribillada sin que en ningún momento sepamos muy bien de su martirologio, aunque lo atribuyamos a las cosas de Alá. Compensa con unos minutos finales en los que reluce la amargura y el desencanto. De los soldados secretos nadie hablará, aunque hayan sido los cleaners del embrollo.

«13 horas: Los soldados secretos de Bengasi»

EE UU, 2016. Director: Michael Bay. Intérpretes: James Badge Dale, John Krasinski, David Denman, Pablo Schreiber, Max Martini, Dominic Fumusa. Acción. 144 minutos.