El escritor y columnista de La Voz publica en Espasa «El libro de Jonás», su nueva novela
22 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.En poco más de una semana, en cuanto comience el año nuevo, las librerías de todo el país -y también las de buena parte de los países en los que se habla español- recirán los primeros ejemplares de El libro de Jonás, la nueva novela de Ramón Pernas. Quienes han leído el manuscrito de esta obra, que publica Espasa, desvelan que no solo es la más ambiciosa de las novelas de Pernas, sino también la más bella; y que a través de sus páginas la voz del narrador va encarnándose en la vida, y la vida encarnándose en ella, hasta alcanzar un punto en el que, como en la poesía, todo cuanto se dice acaba por ser cierto.
«Ahora vuelvo a Vilaponte a través de la memoria», confesaba ayer el propio Ramón Pernas (Viveiro, 1952), dueño y señor de ese territorio literario, a medio camino entre la geografía y la magia, cuya luz tanto se parece a la de la tierra en la que él nació y creció, a orillas del Landro.
Una foto de Cartier-Bresson
En un sutil homenaje al arte de conservar los instantes para siempre, de convertir en eternidad -a través del arte- lo que podría haberse llevado el viento, los editores de Espasa han elegido, para ilustrar la cubierta de El libro de Jonás, una fotografía de Henri Cartier-Bresson en la que los niños juegan en un mundo que ya no existe, en un pasado que naturalmente fue en blanco y negro. «Esta novela es, también, una novela de amor -comenta Pernas-. Una novela de amor... y de muerte». El libro, cuya intensidad, no exenta de crudeza, para nada aleja la musicalidad de la voz de un novelista que también ha escrito grandes versos, invita a reflexionar sobre la cruel naturaleza del tiempo.