La muestra está marcada por su carácter experimental y por el diálogo con el edificio de Siza
09 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Un proyecto en proceso. Esa es la principal definición de Vestiges d’un ici, vestixios de si, la exposición de la artista viguesa Loreto Martínez Troncoso en el CGAC. Al proceso de montaje ya llevado a cabo, en donde se aprecia un claro diálogo con el edificio diseñado con Siza, se le añadirá otro de desactivación de las obras. «Hasta junio van a ir cambiando cosas», avisa la artista. Y ya se puede comprobar que algunas ya lo hicieron. El espectador se puede llevar para casa un póster con los primeros esbozos de esta primera muestra individual de la creadora viguesa en el CGAC.
La exposición «é fundamentalmente experimental», aseguró el director del museo, Santiago Olmo. Una característica en la que también incidió la comisaria, Chus Martínez Domínguez, que destacó «a oportunidade única para experimentar o traballo desta artista» que representa Vestiges d’un ici, vestixios de si.
Tres películas de 16 milímetros creadas específicamente para este proyecto son la base principal en la que se asienta la muestra, que también incluye instalaciones, vídeo, escultura y piezas sonoras. Se trata de trabajos significativos realizados durante los últimos diez años. «A mostra é unha relectura da súa obra, centrada na performance, dende onde parte cara a outras expresións. Ten un carácter de revisión, máis que retrospectiva», afirmó la comisaria.
Vestiges d’un ici, vestixios de si tiene un marcado carácter colaborativo con la participación de la artista lituana Elena Narbutaité, que realiza la instalación de luz que recibe al visitante; y del músico Ramón Souto, que compuso la ópera Euphoria, que se estrenará el 27 de abril. El director xeral de Políticas Culturais, Anxo Lorenzo, indicó que la muestra se enmarca en el propósito de mostrar la obra de artistas gallegos de media carrera.