Nacho Díaz, Goya al mejor maquillaje: «Lariño es un sitio muy especial para mí, por eso lo mencioné en el discurso»

Mónica Pérez
Mónica Pérez REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

Nacho Díaz agradece el premio, junto a Ana y Belén López, y los cómicos Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla
Nacho Díaz agradece el premio, junto a Ana y Belén López, y los cómicos Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla Chema Moya | Efe

Recibió el premio por sus trabajos de caracterización en «Mientras dure la guerra»

27 ene 2020 . Actualizado a las 09:21 h.

En pleno discurso de uno de los premiados con un Goya en la categoría de mejor maquillaje y peluquería por Mientras dure la guerra, uno de los tres galardonados que subieron al escenario al recogerlo lo dedicó a Lariño. Ese Lariño es la parroquia de Carnota, a donde Nacho Díaz viaja con frecuencia junto a su mujer, Naira, nacida en Galicia. «Lariño es un sitio muy especial para mí donde siempre me tratan muy bien y por eso lo mencioné en mis agradecimientos», explica el maquillador. «Su tío es el dueño del bar Pórtico, allí es donde pasamos el tiempo», detallaba en pleno viaje de regreso desde Málaga.

-¿Es su primer Goya?

-Sí, llevo muchos años en esto pero es la primera vez que lo gano.

-Su discurso fue uno de los más emotivos de la noche.

-Estaba muy emocionado porque me lo entregaron dos personas que son muy especiales para mí, Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla, que no sabía que iban a ir. Llevo casi veinte años trabajando con ellos y fue muy emocionante. He hecho todos los maquillajes de Joaquín desde el 2001, todas las transformaciones de sus programas.

-¿Fue muy complejo el maquillaje de «Mientras dure la guerra»?

-Es maquillaje de efectos especiales, y en este caso me encargué de los tres protagonistas: Karra Elejalde, que interpretaba a Unamuno; Eduard Fernández, que era Millán Astray; y Santi Prego, que era Franco. Ellos iban caracterizado con prótesis, las construimos con silicona que luego en rodaje se pegan sobre su cara. Tenemos que sacarle un molde de su cara a cada actor y trabajamos con una copia de su rostro. Tardamos entre dos y tres meses en diseñar y crear ese maquillaje. Lo difícil de este proyecto era que iban a llevar prótesis en la cara y que eran los protagonistas, que iban a estar todo el rato en pantalla. Así que había que hacer algo muy realista, no se podían notar nada falso.

-¿Vendrá el Goya a Lariño próximamente?

-Pues no sé, no descarto llevarlo este verano para que lo vean y lo toquen los familiares y amigos de allí.