La intriga plantea un escalofriante caso a su personaje, el detective Dave Gurney
01 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El caso de John Verdon (Nueva York, 1942) demuestra que quien persigue sus sueños con suficiente perseverancia al final acaba por convertirlos en realidad. Tras décadas en el mundo de la publicidad, Verdon quiso darle un giro a su vida: escapar de la gran ciudad, mudarse a una zona rural en busca de tranquilidad y sosiego. Con su mujer, que también renunció a su trabajo docente, se asentó en las montañas Catskills, se formó como ebanista y se dedicó a los muebles. Pero su primera vocación, la literatura, seguía tirándole de la manga. Y, años después de decidir que se dedicaría a la publicidad para ganarse la vida, se dejó guiar por su instinto y escribió una novela policial.
El resultado fue Sé lo que estás pensando, publicada en el 2010, fue un rotundo éxito que incluso cogió por sorpresa al agente y editor de Verdon, quienes se apresuraron a pedirle una continuación: había nacido la serie del detective Dave Gurney. Sus casos prosiguieron en novelas como No abras los ojos, que revalidó el triunfo comercial de su predecesora, sentando definitivamente las bases para que Verdon pudiese dedicarse por completo a su gran pasión, las intrigas al estilo más clásico, como lector devoto que es de Conan Doyle, Raymond Chandler y Reginald Hill, entre otros.
Toda una pesadilla
Pero si la carrera literaria de Verdon ha sido un sueño hecho realidad, no puede decirse lo mismo de los personajes de su novela Controlaré tus sueños. Un misterioso caso que vuelve a poner a prueba las habilidades de Gurney, y que La Voz ofrece este domingo a sus lectores por el precio de 5,95 euros, dentro de su colección de ediciones especiales de éxitos contemporáneos de la intriga y el suspense. El punto de partida no puede ser más enigmático y escalofriante: cuatro personas que no se conocen de nada, que viven en lugares diferentes, experimentan el mismo sueño. Un sueño de pesadilla, ya que les cuesta la vida. Soñar con un cuchillo ensangrentado en cuyo mango está tallada la cabeza de un lobo es el gatillo que los lleva al más allá, en lo que aparentemente parecen suicidios.
Pero nada es lo que parece y pronto se establecen conexiones entre las víctimas, que habían visitado el mismo hotel y también compartían terapeuta. Una madeja de pistas e intuiciones que Gurney deberá desenrollar, enfrentándose a la vez a un peligroso asesino y a una unidad de la CIA, lo que le permite a Verdon traer a escena cuestiones como la intimidad y la vigilancia.
De esta forma, Gurney también se convierte en un vehículo a través del cual Verdon puede reflexionar sobre cuestiones que le interesan. El thriller es, para él, un medio moral, ya que se plantean preguntas sobre el bien y el mal y la conducta de los personajes. No es extraño, por tanto, que el detective comparta rasgos con su autor, desde el lugar de nacimiento -el Bronx- a la misma universidad y el giro de guion vital al cambiar la gran ciudad por las montañas. Incluso hay una similitud de pensamiento, aunque Verdon se apresura a aclarar que Gurney también piensa por sí mismo. «Al fin y al cabo, es un detective de homicidios», explica. Una mente racional que se esfuerza por esclarecer los casos más complejos, como el que plantea Controlaré tus sueños: toda una garantía de que el lector que lo acompañe disfrutará de su historia.
«Cobra», de Frederick Forsyth
La próxima entrega de la colección de intriga y misterio de La Voz trae a todo un clásico del género: Frederick Forsyth. Con el periódico del domingo 9 de agosto se puede adquirir, por 5,95 euros, su novela sobre el tráfico de cocaína, Cobra. Un negocio multimillonario que lleva a un exagente de la CIA desde los barrios bajos de Bogotá a las altas esferas de Washington.