Francisco Cerro Chaves se avergüenza del sensual vídeo de Pucho y Nathy Peluso, grabado en la Catedral, y pide perdón por el «uso indebido de un lugar sagrado». Horas antes, el propio deán del templo defendía que aunque recurre a un «lenguaje visual provocador», la canción «presenta la historia de una conversión mediante el amor humano»
09 oct 2021 . Actualizado a las 09:40 h.No gana para disgustos el arzobispo de Toledo. A mediados de agosto, después de que Vox pidiese retirar el cartel de una actuación de Zahara en la ciudad castellana por atreverse a convocar al público desde una imagen en la que aparecía caracterizada de Virgen María, Francisco Cerro consideró «intolerable» que «bajo el amparo de una falsa libertad de expresión», con «burlas» a las realidades sagradas, se estuviesen hiriendo «gravemente» los «sentimientos religiosos de miles de ciudadanos». Apenas dos meses después se ha visto obligado a salir de nuevo en defensa del decoro cristiano, porque, como mínimo, debe uno ser coherente. El revuelo corre a cargo esta vez de C. Tangana, experto en el arte de dar que hablar, y Nathy Peluso, que con todo su descaro se han marcado un espectacular meneo en la Catedral de Toledo para presentar a mundo su pegadiza y muy subida de tono colaboración musical.
El tema se llama Ateo y en él Pucho y la argentina hacen gala de una envidiable pasión al ritmo de una bachata compuesta y producida en sintonía junto a Alizzz, Victor Martínez y Rafa Arcaute. ¿El problema? Que todo el interés, el antojo carnal y el hambre se los profesan la parejita en el gran templo gótico español, la Primada. Casi nada, oigan. Provocador por naturaleza, el Madrileño ha sacado de sus casillas al prelado toledano que, al parecer, nada sabía del rodaje. Y mientras el propio deán de la catedral, Juan Miguel Ferrer, respaldaba el vídeo defendiendo que «no afecta a la fe» y que, pese a utilizar un «lenguaje visual provocador», «presenta la historia de una conversión mediante el amor humano», el arzobispo se apresuraba a redactar un escrito para arreglar el desaguisado pidiendo perdón a todos los fieles laicos, consagrados y sacerdotes que «se han sentido justamente heridos por este uso indebido de un lugar sagrado».
Monseñor Cerro «desconocía absolutamente la existencia de este proyecto, el contenido del mismo y el resultado final», reza el comunicado, hecho público este viernes por la tarde. Desde él, el Arzobispado desaprueba las imágenes grabadas en el templo y se compromete a revisar el procedimiento con el objetivo de «evitar que vuelva a suceder algo semejante». Para ello, anuncia además que elaborará «inmediatamente» un protocolo para la grabación de imágenes de difusión pública en cualquier basílica de la Archidiócesis.
También el sacerdote al frente de la Catedral Juan Miguel Ferrer se había disculpado horas antes, pero él con la boca pequeña: destacó que el pelotazo musical «contrapone la comprensión y acogida de la Iglesia» a «ciertas actitudes de intolerancia» y consideró que la incitación a la que se recurre en el videoclip es «un lenguaje propio de la cultura» actual. Añade que la Catedral «ha procurado mantener un diálogo sincero con las manifestaciones culturales del momento», tratando de responder a lo que pide actualmente la Iglesia. Sin embargo, puede que haya algo más tras su comprensión: tal y como asegura El digital CLM, la productora de C. Tangana habría desembolsado 30.000 por hacer uso del templo, una cantidad que se habría pagado directamente al Cabildo, un organismo independiente, sin pasar por el Arzobispado.
El equipo de producción escogió para el tirón de pelo más carnal de la temporada lugares emblemáticos del templo como el coro, la sala capitular o la sacristía. Pero el escándalo no se reduce al escenario: a la letra de Ateo, que no se queda corta de imágenes religiosas y alusiones al deseo [«Quiero hacerle religión a tu melena, a tu boca y a tu cara / Y que me perdone la Virgen de la Almudena / Las cosa' que hago en tu cama»], se suman los cameos de Pedrerol, Cayetana Guillén Cuervo y María Pombo para acompañar a Puchito y a La Sandunguera que, una vez más, lo han vuelto a hacer. Que se hable. Aunque nos avergüence, aunque nos incomode, aunque nos ponga colorados. Aunque sea mal. Que hablen.