La compañía teatral dijo adiós en el estreno de una pieza en el festival compostelano Escenas do Cambio
06 may 2022 . Actualizado a las 09:18 h.Un estreno y un adiós. La compañía compostelana Voadora, uno de los referentes de la escena contemporánea no solo en Galicia sino a nivel nacional, anunció este jueves por sorpresa su despedida en el festival Escenas do Cambio durante su espectáculo Hoax Hamlet, una pieza que se convirtió en la representación del final de su trayectoria después de quince años y más de veinte producciones escénicas. «Esta es la última función de Hoax Hamlet, esta es la última vez que trabajaremos juntos. Estáis asistiendo al último acto de Voadora». Con estas palabras después de 37 minutos de lo que iba a ser el nuevo estreno de un espectáculo de la compañía, Hugo Torres, uno de sus fundadores junto a Marta Pazos y José Díaz, anunciaba el punto y final.
El montaje, marcado por la plasticidad —seña de identidad de Voadora—, se convirtió en un repaso por su trayectoria y también en un homenaje a todas las personas que trabajaron con ellos. El protagonismo en la escena lo tuvieron miembros de la compañía que habitualmente se encontraban alejados de las tablas: el técnico de sonido, el contable, el iluminador y el ayudante de escenografía. Junto a ellos, dirigiendo e interaccionando, los tres fundadores de Voadora. Para esta despedida recurrieron a sus orígenes, precisamente, utilizando la escenografía de su primer espectáculo, Periferia, en el 2008. «O tema era o fracaso e foi un fracaso; o único que sabiamos era que queriamos traballar xuntos», explicó Marta Pazos. También hubo guiños en el vestuario a otros montajes realizados a lo largo de su trayectoria.
Pero tras anunciar su adiós, aún quedaba un cierre lleno de emoción. Incluso se vio alguna lágrima entre las decenas de asistentes que habían acudido a la Cidade da Cultura con la única previsión de asistir al nuevo espectáculo de Voadora. Tras agradecer al público el apoyo durante todos esos años, los fundadores pidieron que los acompañaran «a enterrar este monstruo». De esta forma, los espectadores acabaron convirtiéndose en inesperados integrantes de un cortejo fúnebre. La urna con ese «monstruo» quedó bajo la tierra en los jardines del Gaiás.
La despedida de Voadora llega en un momento álgido de la compañía, que en los últimos años no había parado de incrementar su proyección, como demuestra la elección de sus espectáculos por parte del Centro Dramático Nacional (CDN), como fue Siglo mío, bestia mía, o sus producciones a nivel internacional, caso de Garage, en colaboración en la MA Scène Nationale de Montbeliard. De su factoría también salió la primera ópera gallega del siglo XXI, A amnesia de Clío, un proyecto estrenado a finales del 2019 de la mano de la orquesta compostelana Real Filharmonía. Pero en Galicia aún quedan un par de ocasiones para disfrutar del buen hacer de la compañía. Su espectáculo Othello —candidato a ocho premios María Casares— podrá verse en Heidelberg, Alemania (8 de mayo), Oporto (21 y 22 de mayo), Narón (28 de mayo) y Ourense (9 de junio).