Xosé Díaz: «A Fundación Luis Seoane atópase nun estado de abandono lamentable»

m. carneiro A CORUÑA / LA VOZ

CULTURA

Patronos acusan a la fundación de descuidar la obra de Luis Seoane, de mantenerla en un segundo plano.
Patronos acusan a la fundación de descuidar la obra de Luis Seoane, de mantenerla en un segundo plano. Eduardo Pérez

El albacea del pintor reclama la musealización del legado del artista

19 ene 2023 . Actualizado a las 05:15 h.

La biblioteca de la Fundación Luis Seoane de A Coruña está «practicamente inundada». El edificio histórico del antiguo cuartel de Macanaz rehabilitado en la primera década del siglo XXI por los arquitectos Creus y Carrasco se encuentra en un «estado de abandono lamentable, con goteiras, filtracións e, o máis importante, o patrimonio extraordinario que custodia nunhas condicións que non son as que debe ter». Así describe el diseñador Xosé Díaz, albacea de Luis Seoane y miembro vitalicio de la institución que vela por el legado del pintor, la penuria material que desde hace años amenaza la conservación de los fondos y que afloró en las últimas semanas a raíz de la renuncia del poeta Xavier Seoane como patrono de la fundación. «Cansou de denunciar o tema e de intentar cambiar o modelo de xestión, tamén en desacordo coa programación, e marcha. Entende que quedando no padroado está avalando a situación», explica el hijo de Isaac Díaz Pardo, que alude, en calidad de albacea —junto con el arquitecto Manuel Gallego Jorreto—, «á responsabilidade grande que temos de botar as cousas para adiante e poñer en valor o patrimonio dun dos máis grandes artistas de Galicia, intelectual, deseñador e empresario da comunicación do século XX».

De la obra de Seoane apenas se ha abierto en Galicia una sala en la primera planta del edificio de la Ciudad Vieja coruñesa. Veintisiete años después de que la viuda del artista donara su archivo al ayuntamiento, entonces gobernado por Francisco Vázquez, el mandato de crear un museo no se ha cumplido. «É o primeiro punto dos estatutos e o fin fundamental da fundación, pero a verdade é que non sae adiante», observa Xosé Díaz, que admite que «os directores sucesivos centráronse máis nas exposicións de arte contemporáneo» que en avanzar en el proyecto museístico, aunque a la vez subraya las dificultades para llevarlo a cabo. «Hai anos falouse de combater as filtracións e amañar a climatización para garantir a conservación da obra, pero seguimos igual, non sei como estará agora», señala el albacea. Los trabajos, valorados en 800.000 euros por el equipo de la alcaldesa, Inés Rey, después de actualizar el proyecto aprobado por el gobierno anterior, podrían adjudicarse en los próximos meses en caso de que se cumplan las previsiones municipales.

En su carta de dimisión, Seoane denuncia expresamente el retraso en la musealización y la elaboración del catálogo razonado de la obra, una falta cuya trascendencia quedó hace dos años en evidencia a propósito de una exposición sobre Luis Seoane y Maruja Mallo comisariada por Antón Castro en Lalín con el aval de la Xunta. La fundación coruñesa emitió un informe en el que cuestionaba la autenticidad de 13 óleos, cuatro guaches y una acuarela incluidos en la muestra y atribuidos a Seoane. El caso se dirime en un juzgado desde hace un año. Desde junio, una comisión creada a tal efecto en la Seoane trabaja, «a largo plazo», en el catálogo ansiado.