Manuel Segade feminiza y «performatiza» el Reina Sofía

Miguel Lorenci MADRID / COLPISA

CULTURA

 Manuel Segade, durante la presentación de la nueva temporada del Reina Sofía, museo que dirige.
Manuel Segade, durante la presentación de la nueva temporada del Reina Sofía, museo que dirige. M. L.

El director del museo diseña una temporada en clave femenina que da cancha a varias «performers» que abordan temas como la inmigración y racismo; anuncia un proceso de reordenación de la colección que durará más de tres años y precisará obras en todas su sedes

17 sep 2024 . Actualizado a las 22:28 h.

Decididamente feminista y con un papel protagónico para varias performers que exploran temas como la inmigración o el racismo. Así será la nueva temporada del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en la que las artistas serán dueñas y señoras. Su director, el gallego Manuel Segade (A Coruña, 1977), diseñó un calendario expositivo feminizado con el que empieza a pasar página sobre la herencia de Manuel Borja-Villel. Abordará además la «paulatina» reordenación de la colección que ya reestructuró su antecesor. Si parte de las propuestas son heredadas, Segade aporta tres muestras clave dedicadas a Laia Estruch, Marisa González y Néstor Martín-Fernández de la Torre.

La temporada será el prolegómeno de un trienio de notables cambios tanto en la colección como en la piel y la estructura arquitectónica y administrativa del museo. Se abordarán reformas en su sede principal, en sus fachadas de los edificios Nouvel y Sabatini, en algunas de sus salas y auditorios, y se cerrarán por obras los palacios de Cristal y de Velázquez en el parque del Retiro. La reordenación de la colección, a partir del 2026, y los trabajos en el histórico edificio Sabatini «no alterarán la visita al Guernica».

Detalle de la obra de Soledad Sevilla «Sin título, 1977».
Detalle de la obra de Soledad Sevilla «Sin título, 1977». Museo Reina Sofía

Cinco de las nueve exposiciones estarán dedicadas a creadoras. «Las mujeres artistas, la performance y su cuerpo, y el inicio del siglo XX en España son los tres pilares de la nueva temporada», resumió Segade, ataviado con llamativo traje de tela plisada y «color verde esperanza», según él mismo destacó. Abrirá el curso con una gran retrospectiva dedicada a Soledad Sevilla, ganadora del premio Velázquez 2021. Titulada Ritmos, tramas y variables, es la más ambiciosa de las nueve exposiciones temporales programadas. Tomarán el testigo creadoras nacionales como la barcelonesa Laia Estruch y la bilbaína Marisa González (premio Velázquez 2023 y pionera del arte feminista y la crítica a los medios), la libanesa Hugette Caland, o la performer lisboeta de origen africano Grada Kilomba, cuya muestra de presentación en España programó Borja-Villel. «Caland y Kilomba tratan temas como el racismo o las migraciones en sus muestras —incide el director del Reina Sofía—. La obra de Caland atraviesa los grandes problemas migratorios del siglo XX; es una pintora que trabaja el textil de la que mostraremos más de 200 obras en la mayor retrospectiva que se realizó nunca de su trabajo», destaca de esta artista nacida en 1931 y fallecida en el 2019 y a cuyo trabajo ha prestado atención el MoMA y otros grandes museos. Opera to a black Venus. ¿Qué nos diría mañana el fondo del océano si hoy se vaciara de agua? se titula la muestra de Kilomba cuyas performances abordan la memoria, el trauma, la raza y el género.

La muestra dedicada al arte «político y poético» del guatemalteco Nafus Ramírez-Figueroa y la de Estruch inciden también en la performance. Para Segade, Estruch «es la performer más relevante hoy en España». En Hello Everyone se verán «sus enormes esculturas, que son una partitura física a través de las que genera unos peculiares sonidos con sus acrobacias gimnásticas».

Valle Inclán y Lorca

El museo revalúa además el arte de principios del siglo XX en España con muestras como Esperpento. Arte popular y revolución estética, que «relee a Valle Inclán y su contribución a la vanguardia», argumenta Segade. O ‘Néstor reencontrado’, el rescate del relegado artista canario Néstor Martín-Fernández de la Torre. En el aire conmovido..., comisariada por el filósofo francés Georges Didi-Huberman, se repensará la idea del duende en Lorca. Un verso del Romancero gitano da título a la muestra que incluye obras de Rodin, Giacometti, Dalí o Michaux. «Junto a Esperpento... son dos ensayos expositivos sobre dos aportaciones clave en España la estética del siglo XX traídas al debate cultural del presente», dice Segade.

Menos laberíntico

«La nueva ordenación de la colección permanente y los cambios serán graduales -promete-. Haremos algo muy básico para mejorar la condición laberíntica del museo -prosigue su director- dedicando las tres plantas superiores del edificio Sabatini a la colección permanente y las dos inferiores y los sótanos a las temporales».

Detalle de la conexión de los edificios Nouvel y Sabatini en el museo Reina Sofía.
Detalle de la conexión de los edificios Nouvel y Sabatini en el museo Reina Sofía. R. C.

«Mejorar recursos es lento», admite Segade al abordar el calendario de reformas. En el 2026 se remodelarán las salas dedicadas al arte desde los años 80 hasta la actualidad. En el 2027 se acometerá la tercera planta, que va de los años 40 a los 60, y en el 2028 toda la planta segunda, de finales del siglo XIX hasta la Guerra Civil, con las vanguardias y el Guernica a salvo de cierres.

«Haremos encaje de bolillos para no cerrar sus salas y no interrumpir la circulación de los visitantes», explica. Las reformas arquitectónicas, con un importe de más de 16 millones de euros, se pagarán con fondos europeos adscritos al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).

Este año la modificación más notable se dará en las terrazas del edificio Nouvel con la retirada de una pieza de Toni Miralda para incorporar nuevas obras Martín Chirino, Soto y Negret «que recuperarán el interés por las esculturas geométrica de los años sesenta y setenta».

El museo estrena además organigrama y reorganiza su capital humano, artístico, gestor y administrativo, pasando del grupo 2 al grupo 1, el más alto dentro de la Administración, lo que para Segade «otorga clarísimas ventajas». «Tras los últimos cambios, tenemos un modelo más eficiente y eficaz para garantizar el servicio público de la institución, para poder desarrollar recursos propios y las relaciones con el público, se felicita Segade que tiene como subdirectora artística a Amanda de la Garza y a Carlos Urroz como director del gabinete institucional.

Segade también promete más cine de vanguardia, más literatura y más arte en vivo, desde la música a la danza contemporánea, entre las actividades del museo.