«Truman Capote. Remembranzas y confidencias de sus amistades, enemigos, conocidos y detractores», la afilada biografía (completa y sin censura) escrita por George Plimpton

H. J. P. REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

Capote retratado junto a Harper Lee en 1960 en Garden City, Kansas, en la cocina de la vivienda de Alvin Dewey, el agente del KBI (Kansas Bureau of Investigation) encargado de las investigaciones en el caso del asesinato de la familia Clutter.
Capote retratado junto a Harper Lee en 1960 en Garden City, Kansas, en la cocina de la vivienda de Alvin Dewey, el agente del KBI (Kansas Bureau of Investigation) encargado de las investigaciones en el caso del asesinato de la familia Clutter. Truman Capote Papers | The New York Public Library | Libros del Kultrum

El sello Libros del Kultrum publica por fin en castellano un texto de lectura fascinante y tan afilada como la hiriente pluma del inmortal protagonista

05 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

En 1959 The New Yorker ofreció a Capote hacer un reportaje sobre una señora de la limpieza o desplazarse a un lugar de Kansas donde se habían cometido unos horribles asesinatos e indagar el impacto sobre el pueblo de «una tragedia sin precedentes». Optó por lo «fácil». Pero ni el propio escritor sabía en qué iba a convertirse un encargo que nada tenía que ver con sangre y mentes criminales. Aún no habían detenido a los autores de la matanza y «a Capote le daba miedo ir solo». «La gente no vería con muy buenos ojos que aquel pequeño gnomo con su chaleco a cuadros anduviera rondando por allí haciendo preguntas sobre quién mató a quién». Le dijo a su amiga la escritora Nelle Harper Lee si podía conseguir una pistola para el viaje una vez que ella aceptó acompañarlo. «Creo que cuando Truman vino por primera vez aquí pensaba que todos nosotros éramos un hatajo de paletos». «Allí estaba, con aquella especie de négligé de color rosa, de seda, con encajes, y se puso a pavonearse por el salón, con las manos en la cintura diciéndonos cómo pensaba escribir el libro. [...] No tuve una impresión muy buena de aquel pequeñajo hijo de puta». Truman y Nelle salían a entrevistar gente sin tomar notas y cuando regresaban al hotel escribían lo que recordaban y cotejaban lo averiguado. Él «tenía información que no tenía nadie, ni siquiera nosotros». «Llegó a cogerle mucho cariño a Perry [Smith]. [Dick] Hickock no le gustaba». Se reconoció en la infancia desgraciada de Smith. El éxito abrumador de crítica y económico de A sangre fría hizo que perdiera «el sentido de la realidad». Hasta entonces era «tremendamente disciplinado»; después «empezó a desbarrar». Mediante un ágil montaje de pasajes de cientos de entrevistas, la magna y heterodoxa biografía elaborada en 1997 por George Plimpton —que, aprovechando el centenario del nacimiento de Truman Capote (1924-1984), publica por fin en castellano Libros del Kultrum— es una lectura fascinante y tan afilada como la hiriente pluma del inmortal protagonista. Maravilloso libro. A nadie defraudará. Imprescindible.