El conjunto ferrolano sufrió mucho para igualar el partido
08 dic 2002 . Actualizado a las 06:00 h.El Racing empató a un gol frente al Leganés y mantiene su racha de invicto en casa, donde no pierde desde el 7 de abril. Sin embargo, la igualada no colma las aspiraciones de un equipo ferrolano que sueña con los puestos de cabeza, aunque, una y otra vez, se empeñen en asegurar que el primer objetivo son los cincuenta puntos de la permanencia en Segunda. El Leganés estuvo a punto de llevarse el gato al agua. Tan sólo lo evitó una genialidad de Ángel Cuéllar, quien consiguió el tanto del empate en un gol olímpico. La acción no fue una de esas que entran por casualidad, sino una totalmente premeditada. Primero tiró un córner directo al primer palo, que el portero Vera consiguió desviar con grandes apuros y en el córner siguiente se lo envió al segundo palo, a donde el meta Vera ya no pudo llegar. Del resto del partido sólo se salvan los quince primeros minutos, en los que el Racing tocó bien el balón, triangulo y llegó arriba con peligro. El gol del Leganés, a los diez minutos de la reanudación, llegó tras una acción de estrategia, en un saque de esquina, que Lambea consigue enviar al fondo de la red. El tanto fue un gran incentivo para los ferrolanos, que empujaron con fuerza, pero sin acierto. Al final, apareció la calidad individual de Cuéllar para salvar un punto que supo a mal menor.