Petacchi se impuso al esprint con comodidad en la última etapa
29 may 2005 . Actualizado a las 07:00 h.Paolo Savoldelli reina de nuevo en su tierra. El ciclista italiano del equipo estadounidense Discovery Channel inscribió por segunda vez su nombre en el palmarés del Giro tras completarse ayer la última etapa, un paseo triunfal para el líder que concluyó en Milán con la victoria al esprint Alessandro Petacchi (Fassa). Los últimos 119 kilómetros fueron un trámite para los diferentes vencedores de las clasificaciones, especialmente para Savoldelli que, al igual que en el 2002, ocupó el primer puesto en el cajón final de la carrera. Con el campeón estuvieron en el podio su compatriota Gilberto Simoni, vencedor también en un par de ocasiones (en el 2001 y en el 2003) y el venezolano José Rujano, revelación de la carrera, rey de la montaña y ganador de una etapa. Hasta el callejeo de Milán hubo poco que destacar en esa especie de marcha cicloturista, pues apenas hubo ataques. Lo más emotivo fueron los prolegómenos, ya que se celebró una misa en memoria del malogrado Fabio Casartelli, fallecido como consecuencia de una caída en el Tour. La etapa fue un homenaje al corredor nacido muy cerca de la localidad donde empezó la jornada. Ya en Milán, donde se disputaron los 60 últimos kilómetros, en un circuito, los intentos de escapada fueron numerosos pero ninguno de ellos prosperó. Los equipos con esprínters en sus filas no querían sorpresas, sino poner broche de oro a la carrera, especialmente el Fassa Bortolo. Por ello, los tirones no fueron a ninguna parte en luna fiesta de ganadores que remató Petacchi. El esprínter sumó su cuarta victoria de la presente edición y la 19 en todas sus participaciones en el Giro. En la clasificación final, Savoldelli aventajó a su compatriota Simoni en 28 segundos, la diferencia más pequeña del último cuarto de siglo de historia de la ronda italiana. Líder del equipo Discovery Channel en ausencia del estadounidense Lance Amstrong, el vencedor logró conservar la malla rosa en los ocho últimos días de carrera, tras vestirlo en los Dolomitas, las montañas del norte que resultaron fatales para las aspiraciones de uno de los favoritos, Iván Basso, que sufrió una gastroenteritis. Rujano y Simoni fueron las únicas alternativas de poder ante un Savoldelli muy sólido. Simoni se convirtió en el único jefe de filas del Lampre tras el hundimiento de la gran esperanza italiana, Damiano Cunego, último ganador del Giro, en la primera llegada en alto. Gárate, quinto El mejor español fue Juan Manuel Garate (Saunier Duval), que no pudo subir al podio, pero estuvo muy cerca con su quinta posición. Y Danilo Di Luca (Liquigas), del que muchos decían que no era un corredor de rondas de tres semanas, cerró muchas bocas firmando con su cuarto puesto, que bien hubiera podido ser podio, si en la bajada del Colle de la Finestra no hubiera sufrido un tirón que le obligó a bajar el ritmo.