Ferrero pulveriza a Nalbandián

José María Guimaraens

DEPORTES

21 ene 2008 . Actualizado a las 02:26 h.

Juan Carlos Ferrero, nacido en Onteniente el 12 de febrero de 1980, parece volver por sus fueros a juzgar por lo que ha hecho hasta ahora en el Open de Australia 2007. No conforme con haber eliminado al australiano Alun Jones y al alemán Nicolas Kiefer, sin haber cedido ningún set, ayer se permitió el lujo de dejar fuera del torneo al argentino David Nalbandián (10.º cabeza de serie) tras ganar por 6-1, 6-2 y 6-3 en una hora y cuarenta y cuatro minutos.

Ferrero se cruzará en octavos de final con David Ferrer (5), que se impuso al estadounidense Vincent Spadea por 6-3, 6-3 y 6-2. Los dos resultados de los representantes levantinos no dejan de llamar la atención, sobre todo por la facilidad con que se han desarrollado ambos partidos.

En el caso de Juan Carlos Ferrero causó favorable impresión su retorno al pasado. A juzgar por lo que hizo, un tenis de muchos quilates con golpes muy duros y cruzados, da la sensación de que su objetivo de volver a figurar entre los top ten es algo que se ha tomado muy en serio. Ferrero vivió no hace mucho horas bajas.

El hecho de haber cambiado de raqueta, firmó contrato con Head cuando siempre estuvo usando una herramienta Prince, le costó no pocos resultados adversos. Sin embargo, el pasado mes de diciembre decidió volver a empuñar la Prince y entre eso y que también decidió recuperar el acompañamiento en sus viajes de su entrenador de siempre, Antonio Martínez Cascales, el tenis de Juan Carlos ha subido como la espuma. Y eso lo ha comprobado David Nalbandián en sus propias carnes.

Asesoramiento

Tras un período de tiempo bajo el asesoramiento de José Perlas, ahora técnico de Janko Tipsarevic, el reencuentro en sus desplazamientos con Cascales le ha permitido recobrar la ilusión. Así se explica el claro triunfo de Ferrero sobre un Nalbandián que había cerrado la anterior temporada como el mejor del circuito por sus resultados positivos en la recta final.

Su próximo compromiso, la lucha frente a David Ferrer por el pase a los cuartos de final, se presume muy dura, porque ambos jugadores se conocen a fondo. Hasta ahora se han visto cinco veces en competiciones y el balance es de 4-1 favorable al alicantino Ferrer.

No coinciden en la pista desde los octavos de final del Masters Series de Hamburgo 2006. En aquella ocasión el triunfo fue para Ferrer por 6-2 y 6-4. El ganador de ese duelo español tendrá como adversario al vencedor del encuentro entre el australiano Lleyton Hewitt y el serbio Novak Djokovic.

«Nuestro partido será muy duro y muy especial porque nos conocemos mucho, vivimos cerca y nos entrenamos con frecuencia juntos; mi táctica será no darle demasiado ritmo a David», apunta Ferrero. Por su parte, Ferrer anticipó: «Correré mucho, porque nuestro juego es muy parecido; en realidad no hay ningún secreto en el sistema a seguir: correr pista y tirar el golpe».

El de Jávea es favorito en las apuestas y Ferrero quiere romper el pronóstico. De Juan Carlos no hay que olvidar que es profesional desde 1998. Durante ocho semanas, período iniciado el 8 de septiembre de 2003, llegó a ser líder mundial. Su rosario de once títulos lo inició en el 1999, triunfando en el torneo de Mallorca. En el 2003 fue campeón de Roland Garros. En Australia ya sabe lo que es ser cuartofinalista (año 2004), en cuya ronda perdió con Federer, que después no podría coronarse campeón al perder frente al ruso Marat Safin.