Severiano Ballesteros, héroe de la Ryder Cup durante más de dos décadas, y uno de los capitanes más carismáticos, está convencido de que la edición que se disputa este fin de semana «será más reñida de lo que la gente piensa». Ballesteros fue una de las primeras incorporaciones no británicas al equipo europeo de la Ryder y uno de los grandes artífices de que este torneo (de claro signo dominante de las barras y estrellas) diera un giro de 180 grados. Desde 1979 Europa ha obtenido siete victorias, frente a seis de Estados Unidos.
Seve conoce muy bien a Paul Azinger, capitán del equipo estadounidense, y sabe que su mayor peligro está fuera del campo: «Es un jugador al que no le gusta perder y usa muy bien todas las armas de las que dispone. Utiliza muy bien la guerra psicológica, y ya lleva semanas usándola».
Respecto a la ausencia de Tiger Woods, que se recupera de una operación de rodilla, Ballesteros reconoce que la baja del número uno del mundo será beneficiosa para los europeos: «No tener a tu lado al mejor jugador del momento en el mundo es una clara desventaja para los americanos».