Perdido en el programa de la pista dos de Roland Garros figuraba el partido de ayer del número 103 del mundo. Con unas condiciones espectaculares, Juan Carlos Ferrero vive a los 29 años un difícil declive. Ex número uno del ránking mundial y campeón en París en el 2003, pasó seis años sin celebrar títulos, vio como los grandes torneos le negaban una invitación y sufrió contra las lesiones. Ayer, ganó una batalla contra sí mismo, en un partido muy duro contra Ivan Ljubicic, al que derrotó por 2-6, 6-4, 6-4, 3-6 y 6-3. Aunque incluso él mismo admite que la hora de la retirada no está muy lejos. Le falta «motivación».
En los últimos tiempos, Juan Carlos Ferrero era el último tipo que había derrotado a Rafa Nadal sobre tierra batida, en un partido del torneo de Roma del 2008, cuando el actual número uno del mundo jugó mermado por las ampollas. También tocado, Ferrero ganó, pero hipotecó su temporada por una lesión en los aductores. Apenas jugó el año pasado. Los últimos meses, lo hizo infiltrado por el dolor en la muñeca derecha.
Héroe de la Davis
Ferrero abrió su era triunfal en el 2000. Condujo a España su primer título de la Copa Davis al ganar a Lleyton Hewitt y Patrick Rafter en la final. Después llegaron dos semifinales en París, donde por dos veces le apeó el brasileño Guga Kuerten, una final perdida contra su compatriota Albert Costa, y su triunfo del 2003 frente al holandés Martin Verkerk. No fue solo un jugador de tierra. Alcanzó los cuartos en Wimbledon, las semifinales de Australia, le discutió el título del US Open a Roddick, jugó la final del Masters... Era el mejor. En septiembre del año 2003 se aupó al número uno. Pete Sampras encaraba su retirada y Roger Federer aún maduraba su escalada. Aquella fue la mejor temporada del jugador de Onteniente.
Con el 2004 inició su declive. No pasó la tercera ronda del Roland Garros desde entonces. No ganó un solo título, hasta que hace un mes se impuso en Casablanca.
En su horizonte, cobran más peso sus negocios en Levante que su calendario de torneos. Ferrero se enfrentará ahora con el alemán Philipp Kohlschreiber, vigésimo noveno favorito, que ganó al australiano Bernard Tomic por 6-1, 6-2 y 6-2.