El corredor gallego, que no ha respondido a las duras declaraciones de Álvaro Pino, deberá salir airoso de la contrarreloj de mañana.
14 sep 2010 . Actualizado a las 18:49 h.Ezequiel Mosquera (Xacobeo Galicia) no ha respondido públicamente a las duras declaraciones de su director Álvaro Pino sobre sus aspiraciones en la Vuelta, pero se encuentra ante la oportunidad de su vida de alcanzar el podio en la ronda española.
En la víspera de la «contrarreloj decisiva» de Peñafiel, el corredor gallego considera que «lo normal» es que Vinzenzo Nibali les meta tiempo al resto de favoritos, pero recuerda que aún queda otra cita clave, la etapa de montaña del sábado que acaba en la Bola del Mundo.
«Estoy ante la oportunidad de mi vida para subir al podio de la Vuelta y lo veo a mi alcance. Conseguirlo sería algo muy grande, pero hay que pasar antes dos pruebas importantes», señaló Mosquera momentos antes de salir a inspeccionar el recorrido de 46 kilómetros que acogerá la cronometrada individual del miércoles.
Mosquera, tercero en la general a 53 segundos de Purito, apunta a la contrarreloj como una cita más trascendente que la etapa de montaña del sábado con final en la madrileña Bola del Mundo.
«La contrarreloj es más decisiva que la etapa de la Bola del Mundo. Si llego a la Bola con opciones, pienso igual que Purito, que hay que morir encima de la bicicleta», dijo.
Sobre sus posibilidades en la contrarreloj de Peñafiel, Mosquera tiene claro que el favorito es el italiano Nibali, y que su guerra va más con el actual líder, Purito Rodríguez.
«Como no soy especialista lo único que puedo hacer es salir a darlo todo. De los cuatro que estamos con opciones el único que sobresale es Nibali. La guerra estará entre Purito y yo. La lógica es que Nibali nos distancie a todos, pero son 46 kilómetros y pueden dar para mucho», afirmó el líder del Xacobeo Galicia.
«No sé lo que puedo perder con Nibali. En condiciones normales nos saca bastante tiempo a todos, pero no podemos hablar de condiciones normales porque estamos al final de la Vuelta, es una crono larga y las fuerzas ya van estando muy justas», señaló.
«Perder dos minutos respecto a Nibali entra en mis cálculos», dijo, «pero a Purito siempre le he ganado. Lo que sucede es que este Joaquim no es el de otros años, además está de líder y el maillot rojo le tiene que empujar».
Mosquera recordó sus apuros en la última etapa asturiana de montaña. «En Coto Bello tuve un día para olvidar, pero al final iba todo el mundo igual. Cuando vi cómo tiraba Kreuziger para Nibali pensé que me iba a quedar a principio del puerto».