Al ex tenista estadounidense Pete Sampras, que tenía fama de ser «tacaño» dentro del circuito profesional, el ahorro le ha costado al final perder la mayoría de sus trofeos ganados después de que se los hayan robado de un almacén público donde los tenía guardados.
De acuerdo a una información que ofrece el periódico Los Angeles Times , hace tres semanas que Sampras recibió la mala noticia de que habían asaltado los dos compartimentos del almacén público que rentaba en las afueras de la ciudad californiana, donde tenía guardados la mayoría de sus trofeos.
El propio Sampras es el que da todos los detalles de lo sucedido hace tres semanas, porque la policía de West Hollywood, área donde se encuentran los locales robados, todavía no tiene ninguna pista sobre quién o quiénes son los autores del delito.
Un portavoz del Cuerpo de West Hollywood confirmó que ya se ha abierto una investigación al respecto y que trabajan para esclarecer todo lo sucedido.
Mientras, Sampras, de 39 años, decidió hacer público el robo y dar detalles de la mayoría de los objetos que le robaron, entre los que se encontraban una gran parte de los trofeos que había conseguido como profesional, incluida su primera copa de Grand Slam, que ganó en Australia, en 1994. «Aún conservo 13 de mis 14 grandes. Algunos están en casa, otros están en el NikeTown de Portland, pero mi primer Abierto de Australia se lo han llevado», explicó Sampras.
El ex número uno del mundo detalla en la entrevista, que en el botín se incluyen 50 premios conseguidos en la ATP. «Se trata de trofeos de campeón, entre ellos los cinco Masters y los 11 Masters Series, y otros 24 como finalista. También dos miniaturas de la Copa Davis, un anillo olímpico o los seis galardones conquistados al finalizar el curso en lo más alto del ránking mundial, desde 1993 hasta 1998)», describe Sampras.
El ex tenista estadounidense también detalla que los trofeos robados, que formaban parte de su extenso palmarés profesional, estaban perfectamente guardados en cajas junto a otros muebles que su familia decidió sacar de la casa.
«Decidimos que era la mejor manera de conservarlos y a la vez tenerlos en orden y bajo control. Pensábamos que era un lugar seguro, por eso cuando me comunicaron el robo era algo que no podía creerme», justificó.
Sampras dijo que estaba convencido que el almacén contaba con todo tipo de seguridad, tanto de personal humano como de cámaras de vigilancia.