Ya de vuelta de casi todo, el argentino Juan Ignacio Chela logró ayer un premio en la prórroga de su carrera. Camino de cumplir los 32 años, lo que lo convierte en el más veterano de los jugadores con vida en Roland Garros, igualó su mejor resultado en París tras ganar al colombiano Alejandro Falla por 6-4, 2-6, 6-1, 6-7(5) y 6-2 en tras una batalla de casi cuatro horas.
Falla, número 120 del mundo y procedente de la previa, sintió vértigo en el cuarto set, en el que llegó a disponer de un break, frente a un rival más curtido, que disfruta de su undécima participación en Roland Garros y vuelve a cuartos.
Jugador talentoso, el argentino vio truncada su carrera en el 2001, cuando fue sancionado por un positivo por un esteroide anabolizante, que negó haber ingerido voluntariamente. La sanción implicó también su descenso al puesto número 810 del ránking de la ATP. Fue su vuelta a empezar, lo que le obligó a jugar torneos del circuito challenge. En unos meses ya se había aupado al puesto 70. Especialista en tierra, donde consiguió sus seis títulos -con victorias en las finales ante Mariano Puerta, Marat Safin y Carlos Moyá- alcanzó su mejor ránking en el 2004, cuando se aupó al decimoquinto lugar.
Chela llama a las puertas del equipo argentino de Copa Davis, que capitanea el ourensano Modesto Vázquez, para la eliminatoria de cuartos contra Uzbekistán. Número 35 del mundo, el lunes rondará el puesto vigésimo. En su camino a cuartos, también superó al checo Lukas Rosol, al sudafricano Kevin Anderson y al estadounidense Tim Smyczek. El argentino se medirá con el ganador del duelo entre Andy Murray y Victor Troicki, que se suspendió ayer a punto de empezar el quinto set.