30 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.
Óscar Pistorius, el primer atleta con las dos piernas amputadas que toma parte en un mundial, puso fin a su sueño en los 400 metros, al no poder avanzar hasta la final. El sudafricano, con dos prótesis de fibra de carbono en sus piernas, marcó un tiempo de 46,19 segundos, lejos de su mejor registro e insuficiente para hacer historia en la final.
Para Pistorius todo han sido problemas. Tuvo que recurrir al tribunal de arbitraje deportivo para que le dejasen correr en Daegu y la federación internacional lo abocó a una calle exterior con independencia de su marca. En el relevo con Sudáfrica tendrá que correr la primera posta también por imperativo.