Santa Cruz y Molina firmaron los dos goles del partido.
09 ene 2012 . Actualizado a las 00:00 h.El Betis sumó su tercer triunfo seguido y se situó en una zona ya alejada del descenso, todo lo contrario que el Sporting, que sigue tocado en las últimas posiciones después de salir derrotado por 2-0 en un partido en el que jugó con diez futbolistas desde los últimos minutos de la primera parte.
Al Sporting le faltó más juego en la primera mitad y en la segunda, cuando Alberto Lora ya estaba expulsado por doble amonestación, lo intentó pero sin mordiente ante un rival que se complicó la vida hasta que en la prolongación Jorge Molina puso el 2-0 poco antes de que Carmelo también fuera expulsado para que su equipo acabara con nueve en la última jugada del choque.
Salió el equipo sevillano como era previsible, con mucha fuerza y ganas, y con un ecuatoriano Jefferson Montero que entró con velocidad por el extremo izquierdo para poner en aprietos al conjunto gijonés.
Beñat Etxebarria y el brasileño Iriney Santos, además, cumplieron su misión de imponerse en el centro del campo y todo ello valió para que los del técnico madrileño Pepe Mel llevaran la iniciativa.
Al equipo de Manolo Preciado le duró poco el balón en su poder y Miguel De las Cuevas y David Barral tuvieron enormes problemas para que le llegara juego en las inmediaciones del área local.
Así, Rubén Castro estuvo cerca de poner el 1-0, pero lo evitó el meta Juan Pablo con una acertada salida a los doce minutos de juego, mientras que la primera llegada de los asturianos a la portería bética tardó un cuarto de hora en producirse.
Lo más normal era que el Betis marcara y fue el delantero paraguayo Roque Santa Cruz el que lo hizo a los 23 minutos, al resolver bien un buen pase que le llegó dentro del área.
El Sporting, en una de sus pocas aproximaciones, pudo empatar con un remate de De las Cuevas al que respondió perfectamente el portero Casto Espinosa, pero eso fue un lance esporádico ante un rival que estuvo superior y que pudo poner el 2-0 a la media hora por mediación de Rubén Castro, aunque el remate del delantero canario acabó con el balón repelido por la cepa de un poste.
De ahí hasta el descanso, la formación verdiblanca no tuvo ningún problema, salvos dos aislados remates de Barral con otras dos buenas intervenciones de Casto.
Para empeorar más la situación del lado visitante, el lateral derecho Alberto Lora vio dos tarjetas amarillas en cuatro minutos y dejó a su equipo con diez jugadores antes de que concluyera la primera parte.
Todo se le puso de cara a los locales en la segunda parte con el marcador favorable y un hombre más sobre el terreno y porque, además, Preciado tuvo que hacer un cambio para recomponer la defensa con la entrada del francés Gregory Arnolin en sacrificio de un jugador más creativo como Nacho Novo.
Pese a ello, el Betis salió algo dormido e impreciso en el arranque y el Sporting, con todo perdido, adelantó líneas y con su goleador David Barral muy activo lo intentó, aunque con el paso de los minutos empezó a notar el desgaste.
El equipo de Mel desperdició en las botas de Rubén Castro buenas ocasiones de poner el 2-0 y cerrar el partido, pero no lo consiguió y se entró en la recta final con un resultado que le daba al rival algunas opciones de empatar, pero Jorge Molina despejó las dudas en el minuto 92 cuando logró el tanto de la tranquilidad verdiblanca.
Ficha técnica:
2 - Real Betis: Casto; Isidoro, Mario, Dorado, Nacho; Juanma (Jonathan Pereira, m.69), Beñat, Iriney, Jefferson Montero (Cañas, m.76); Rubén Castro y Santa Cruz (Jorge Molina, m.60).
0 - Real Sporting: Juan Pablo; Lora, Botia, Iván Hernández, Canella; Rivera (Luis Morán, m.72), André Castro (Carmelo, m.60), Óscar Trejo, Nacho Novo (Gregory, m.46); De las Cuevas y David Barral.
Goles: 1-0, M.23: Santa Cruz. 2-0, M.92: Jorge Molina.
Árbitro: Javier Estrada Fernández (Comité Catalán). Expulsó por doble amonestación a los sportinguistas Lora (m.39 y 43) y Carmelo (m.70 y 94). Enseñó tarjeta amarilla a los visitantes Botia (m.79) y Luis Morán (m.84).
Incidencias: Partido disputado en el estadio Benito Villamarín ante unos 35.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.