
El club burgalés rentabiliza sus escasos recursos para dar forma al club de moda en el fútbol
31 ene 2012 . Actualizado a las 17:19 h.Sostienen los estudiosos del deporte que el fútbol moderno goza de tan excelente salud a pesar de sus 149 años de vida debido a la impredecibilidad de sus acciones. El Mirandés encarna la conclusión a la que llega este axioma balompédico. En el mejor momento de sus ochenta y cinco años de historia, lidera con seis puntos de ventaja el grupo 2 de Segunda División B y se ha plantado en las semifinales de la Copa del Rey, que jugará su partido de ida a las diez de esta noche (televisado por Cuatro) en Anduva, por supuesto.
Estas son algunas de las claves que ayudan a entender la gesta mirandesa.
EL HOGAR
Miranda de Ebro, cruce de caminos de hierro
El Mirandés es el equipo de fútbol de referencia de la localidad burgalesa, de 40.000 habitantes, punto clave del desarrollo de las principales líneas ferroviarias que comunicaban España con Europa. A cuarenta kilómetros de Vitoria, en un radio de ochenta tiene a Bilbao, Burgos y Logroño. El equipo se nutre de todas esas canteras futbolísticas, en especial de la del País Vasco.
LA ECONOMÍA
El socio es lo primero
El club recibe dinero de Banca Cívica y de la Junta de Castilla y León, pero su presupuesto de 1,2 millones de euros se sostiene a duras penas con la aportación de los 3.500 socios de la entidad. Los precios de los abonos, unos 225 euros en tribuna y 180 en general.
EL MOMENTO
La guinda a un inicio redondo.
El hábitat natural del Mirandés es la Tercera División, donde ha pasado más de medio siglo. Cumple su tercera campaña en Segunda B, y su mejor racha es de cinco años en esta categoría. En verano estuvo en Segunda División 87 minutos, hasta que el Guadalajara dio la vuelta a la eliminatoria de ascenso. En la anterior (2003-2004), con Pontevedra y Badajoz, fueron los gallegos los que ascendieron. Aunque este año el objetivo era la permanencia, pronto el equipo se encargó de desmentirlo con una incontestable racha de partidos imbatido en Liga, la mejor de las tres primeras categorías nacionales en el arranque de curso. Recibió su primer gol a los 833 minutos, de penalti. Y su primera derrota (0-1), en la jornada 18. Los verdugos, sus rivales más enconados: Burgos y Alavés.
LA PLANTILLA
Pouso peina el fútbol vasco para buscar su «alter ego»
El entrenador Carlos Pouso y el director deportivo Carlos Lasheras han dibujado una plantilla a medida, a coste cero y con once jugadores vascos. Uno de ellos, César Caneda, incluso jugó en Primera con el Athletic, rival de esta noche.
LA ESTRELLA
Pablo Infante, el gol
A sus treinta y dos años es el máximo goleador de la Copa, con siete tantos, y lleva nueve en Liga. Este empleado de banca es la sensación del torneo y la punta de lanza de una plantilla de jugadores semiprofesionales.
LA TÁCTICA
Flexibilidad es la palabra
El entrenador gallego del Villaralbo, Rubén de la Barrera, conoce bien al Mirandés, al que se enfrentó en la final de la Copa de Castilla y León. «Es un proyecto colectivo común que tiene como base la excelente organización del club», analiza el coruñés. «Tácticamente, saben lo que quieren y quiénes son. Es capaz de tener iniciativa con la pelota, pero también está cómodo sin ella. Son principios sencillos encadenados. Conecta al jugador con sus necesidades. Es un modelo fundamentado en la relación del jugador con su juego. Futbolistas a seguir, además de Pablo Infante, son Nacho Garro, Garmendia, Mujika y Lambarri», concluye.
EL ENTRENADOR
Carlos Pouso, el gallego
Hasta que se quedó sin empleo, Carlos Pouso trabajaba en un astillero cerca de Bilbao. Dicen que este hijo de gallego diseñó su plantilla cuando pasaba sus vacaciones en la isla de A Toxa. La madre del defensa César Caneda también es gallega.
LOS VALORES
Esto es Anduva
La directiva renunció a disputar sus encuentros como local en un estadio más grande para obtener mayor beneficio económico. Anduva tiene aforo para 6.000 espectadores y esta noche, una grada supletoria de 1.700 asientos. El Mirandés responde a los valores del compromiso, solidaridad y esfuerzo que corresponde a una población industrial como Miranda de Ebro.
LA ILUSIÓN
Europa es posible
El Mirandés podría jugar la próxima Europa League. Para ello, tendrá que colarse en la final de la Copa. Y que el campeón se clasifique para la Champions.