Los triunfos de Ferrero y Almagro colocan a España a un solo punto de la clasificación a cuartos
11 feb 2012 . Actualizado a las 01:40 h.El anunciado 'plan renove' de La 'Armada' comenzó este viernes con buen pie gracias a las victorias de Juan Carlos Ferrero y Nico Almagro ante Kukushkin y Golubev respectivamente. La calidez y el derroche físico de los tenistas españoles contrastaron con el tímido apoyo del poco público que pobló el Pabellón de Deportes de Oviedo. Porque no fue el habitual ambiente cálido que rodea a cualquier eliminatoria que disputa España en casa. El aspecto desolador de las gradas, unido a la baja temperatura que protagonizó toda la jornada, creó una atmósfera poco común.
El primero en saltar a la pista fue Juan Carlos Ferrero. Con problemas físicos en el tramo final y con un tenista enfrente inspiradísimo con su derecha, el exnúmero uno del mundo dio el primer punto a España después de ganar con mucho sufrimiento por 6-1, 4-6, 7-6, 4-6 y 6-4 a Kukushkin.
Tras cuatro horas y 28 minutos de encuentro, el de Onteniente admitió haber sufrido más de lo que esperaba ante el kazajo: «A priori era un partido que todo el mundo pensaba que era el más fácil. Yo he acusado tener que correr todo el tiempo pero con calma he intentado mantenerme entero en el partido». «Estos encuentros son muy largos y muy duros.
No pensaba que iba a ser tan duro. Me ha sorprendido con su derecha y me ha costado. Pero es un punto que sabe a gloria», confesó el tenista español.
El tercer set, clave para Ferrero
Ferrero, un jugador que se ha doctorado a lo largo de su carrera sobre la tierra batida de medio mundo, impuso se ley en el primer set del choque. El español consiguió aplicar su guion, caracterizado por tiros muy largos, muchos primeros servicios y puntos largos. Enfrente, el juego agresivo y plano del kazajo.
Kukushkin fue poco a poco ganando terreno en la pista y haciendo más daño con su poderosa derecha. Al tiempo que el número 61 del mundo iba conectando sus tiros más cerca de la línea de fondo, el español retrocedía. Con un set iguales, y 4-0 para el kazajo, el español consiguió levantar un parcial que parecía tener perdido a base de casta y de lucha. Ferrero, un guerrero del tenis, confesó al final del choque que «ganar el tercer set ha sido clave para ganar el partido».
A pesar de ceder la cuarta manga y de estar 2-0 en contra en el quinto, era el día de Ferrero, del tenista que dio la primera Copa Davis a España hace más de una década. Aumentó sus prestaciones, remontó el parcial y cerró un primer punto fundamental que allanaba el camino a Nico Almagro. El murciano, con un juego de menos a más y un tenis demoledor en las dos últimas mangas, derrotó a Golubev por 6-3, 4-6, 6-1 y 6-1.
Almagro despierta a tiempo
El tenis explosivo y dominador del número uno español en el primer parcial, basado en un cañón de derecha y un saque efectivo y potente, le sirvió para cerrar la primera manga sin excesivos apuros. Pero un breve momento de relajación le costó caro en el segundo set. Golubev jugaba a ráfagas. Tan pronto destrozaba la bola con su servicio y su 'drive' como llenaba su juego de errores no forzados. Sin embargo, por fortuna para el número 132 del mundo, ofreció su mejor versión en los momentos decisivos del acto e igualó el duelo.
A partir de ese momento Almagro descargó su furia desde todos los rincones de la pista sobre su rival. Mucho más metido en la pista, destrozando la bola tanto desde el fondo de la pista como con su saque, el kazajo poco pudo hacer más que correr de lado a lado y limitarse a ver como los juegos caían uno tras otro del lado del número uno español. Calcando el resultado de los dos últimos sets, el líder de la nueva versión de La 'Armada' colocaba al equipo español a un paso de su clasificación.
Después de las dos victorias de este viernes, y a la espera del partido de este sábado que disputarán Marcel Granollers y Marc López, España está también pendiente de su posible rival en la siguiente ronda: Austria, que vence 2-0 a Rusia. Una eliminatoria que se jugaría en casa y en la que La 'Armada' volvería a ser favorita.