La selección de Scariolo cae ante la favorita a conquistar el oro en Londres, en la esperada antesala de la cita olímpica
25 jul 2012 . Actualizado a las 03:15 h.La selección española de baloncesto cayó ante Estados Unidos (78-100), después de un partido que comenzó dominante pero en el que acabó sucumbiendo a la intensísima defensa de los grandes favoritos al oro en los Juegos Olímpicos de Londres. El liderazgo de LeBron James y los puntos de Carmelo Anthony pusieron a Estados Unidos firmes después de un gran inicio de España, que acusó las rotaciones y el fallo en los lanzamientos de tiros libres.
España tuvo 12 minutos de inspiración brutal en el aranque del partido. Un aldabonazo en toda regla, un aviso a Estados Unidos de que el oro tiene un candidato si los principales opositores a campeones olímpicos desfallecen. Fue la selección de Scariolo el mismo rodillo que aplicó sobre Argentina en A Coruña. Liderada por Ibaka, asociado a la dirección de Calderón, España llegó a dominar 22-13 y Mike Krzyzewski, seleccionador estadounidense, tuvo que parar el encuentro.
Pero la selección española bajó el pistón a medida que Scariolo relevó a sus titulares, y Estados Unidos reaccionó con la entrada de un Carmelo Anthony en estado de gracia. Enjugó la diferencia (23-21) al final del primer cuarto, y subido a los puntos del jugador de los Knicks, le dio la vuelta al resultado. Anotó 23 puntos en la primera mitad Anthony, y EE.UU. sacó partido de su quinteto más bajo. La defensa de LeBron James sobre Gasol anuló a Pau, y la intensidad física de los estadounidense propició muchas pérdidas y contragolpes sin respuesta en España.
Puso el 40-48 Estados Unidos al descanso, incapaz España de frenar la sangría de contras conducidas por LeBron o Kobe, o de encontrar la fluidez ofensiva del inicio del partido. Kevin Durant terminó por romper la baraja. Tímido hasta entonces, encadenó 10 puntos en el arranque del tercer período. La diferencia creció hasta los 21 tantos (48-69) con 5 consecutivos de Westbrook, que anuló a Calderón. España apenas encontraba respuesta en balones interiores de Gasol, desaparecido Navarro. El parcial crecía a un contundente 25-55 para Estados Unidos desde la máxima ventaja española en el primer cuarto.
El 60-74 con que arrancó el último período se explica porque España optó por la zona para cerrar la herida, con resultados mixtos, porque la selección estadounidense tenía un día inspirado en el triple. Lo demostró LeBon James cuando anotó dos consecutivos ante Gasol (71-92). A España le lastró también una noche aciaga en el tiro libre (falló 13 de 28 lanzamientos).