Tiago Pinto, de 24 años, se incorpora al Dépor con apenas dos temporadas de trayectoria profesional en Portugal. Más allá del relumbrón propio de ser el único hijo varón del histórico João Pinto, una de las estrellas de la generación de oro de la selección lusa junto a Vítor Baía, Figo, Nuno Gomes y Rui Costa, el nuevo futbolista blanquiazul tiene aún por cocinar su carrera, ahora tutelada por Jorge Mendes, el todopoderoso agente portugués que ha colocado este verano en A Coruña a seis futbolistas. Además de Pinto, Nélson Oliveira, Roderick, Pizzi, André Santos y Salomão.
Si su padre nunca más volvió a jugar en el extranjero tras su experiencia en el filial del Atlético de Madrid, ahora el hijo da el salto a la Liga española. Jugador de corte ofensivo, aunque hasta llegase a jugar de defensa central en sus inicios, impresionó tardíamente. Es más, lo descartaron en las escuelas del Benfica, donde João Pinto disputó el tramo central de su carrera. Así que el joven Tiago acabó en las del Sporting, donde hasta la edad júnior no llegó a colar su nombre en las convocatorias de las categorías inferiores de la selección.
Pero su idilio con el equipo de Alvalade terminó al no llegar a un acuerdo para firmar un contrato profesional. Así, jugó en los modestos Olivais Moscavide y Trofense antes de regresar a la máxima categoría con el Braga, donde no jugó, y, por fin, las dos últimas temporadas en el Río Ave, en el que disputó 49 partidos (27 la última, cuando no marcó, pero sufrió dos expulsiones). En la primera había coincidido con Bruno Gama, una promesa en el equipo del Norte de Portugal que se está haciendo realidad en A Coruña. Estas cifras le valieron para destacarse como el jugador más apetecible de su club que, asegura la prensa lusa, llegó a rechazar una oferta del Cluj rumano por él y por el lateral derecho Vítor Gomes de tres millones de euros.
El nuevo lateral zurdo del Dépor aún parece un escalón por debajo de Gama y también de los internacionales Oliveira y de Pizzi, sin duda sus grandes referentes de blanquiazul. Y es que su gran sueño sería pugnar por el lateral de la selección con el madridista Fabio Coentrão, quien apenas tiene competencia.
Habitual de la prensa rosa en su país, Tiago Pinto, tiene dos hijos, Santiago, de dos años, y María Paz, nacida las pasadas Navidades.