«El Madrid-Deportivo es uno de los dos partidos con el pronóstico más claro?», comentó ayer el paisano, más con propósito de iniciar la conversación mañanera que de otra cosa. Entonces, le pregunté: «¿Y cuál es el otro partido?». Y ahí surgió un pequeño debate, como no podía ser de otra manera, en un tema que poco antes de encontrarme con nuestro amigo, habían debatido en Radio Voz Pablo Portabales y Mario Durán. Más que el posible resultado del Bernabéu, discutieron sobre si era, o no, conveniente la alineación de Valerón. Incluso creo que quedó grabada una apuesta: Portabales, que sí, y Mario, no? «Porque Oltra podría elegir a un hombre que corra más en el campo», creí entender al redactor deportivo quien, dicho sea de paso, hablaba para el programa Voces de La Coruña desde el mismo campo de entrenamiento, en Abegondo.
Al final, nada quedó claro o, mejor dicho, todo está muy negro de cara al marcador del partido de mañana. Pero no olvidemos que estamos hablando de fútbol. Hace más de medio siglo, el 29 de octubre de 1955, en el hotel Victoria de Madrid, le dije a Rodrigo, entonces entrenador del equipo coruñés: «¡Tranquilo, jefe, mañana no tenemos nada que hacer?!». Aquel partido lo ganó el Deportivo por 2-1. El del centenariazo sería muchos años más tarde.