El entrenador del SD Logroñés se enfrentará a uno de sus exequipos en Las Gaunas
16 oct 2013 . Actualizado a las 12:25 h.El Compostela visitará el domingo (cinco de la tarde) a uno de los dos equipos de Logroño que milita en el grupo primero de Segunda División B. La Sociedad Deportiva, que ocupa la undécima posición en la tabla, tiene un inquilino en el banquillo bien conocido por la afición del Compostela. Se trata de Tato Abadía, centrocampista que tantas buenas tardes de buen fútbol dedicó a la afición de San Lázaro.
Agustín Abadía Plana (Binéfar-Huesca, 1962) es el máximo responsable técnico de un equipo modesto, que cuenta con poco más de mil socios y con un presupuesto que supera el medio millón de euros. El S.D. Logroñés juega en Las Gaunas, un estadio con capacidad para dieciséis mil aficionados. El domingo, el cuadro rojiblanco recibirá al Compos. Y Abadía lo hará al menos con seis bajas en sus filas. Ante el cuadro santiagués no estarán los lesionados Jorge Herreros, Fran Sota, Iván Salazar, Jesús Yécora y David Olavarreta, quien empezó a entrenarse pero todavía sin el ritmo suficiente para entrar en una convocatoria. Además, estará ausente el sancionado Jon Moya, que cumplirá un partido de suspensión.
Sin embargo, uno de los grandes protagonistas será el excompostelanista Abadía, que colgó las botas en 1998. Lo hizo en el mismo equipo en el que debutó, en el Binéfar, el club de su localidad natal. Sus primeros pasos como técnico fueron en las categorías inferiores del Binéfar.
Después de tres campañas arribó al banquillo del Logroñés. Luego se fue al Girona y regresó al Logroñés como director deportivo. Su siguiente experiencia fue en el Calahorra. Trabajó con la cantera de la federación riojana y en febrero del 2011 fichó por la Sociedad Deportiva Logroñés en Tercera División. Logró el ascenso a Segunda B y este domingo medirá sus fuerzas ante el Compostela, uno de sus ex equipos.
Como futbolista
Como futbolista, Abadía defendió la camiseta del Logroñés en Primera División. En el curso deportivo 1989/1990 le llegó la oportunidad de firmar por uno de los grandes. Javier Clemente le llamó para el Atlético de Madrid. Uno de sus cuatros ascensos como futbolista lo protagonizó en el Compostela, de Segunda a Primera División en la campaña 93-94 con Fernando Castro Santos en el banquillo y con otros ilustres deportistas en las filas de una plantilla que hizo historia.