
Los excompañeros de equipo Dani Hernández y Chema Cid escenifican la rivalidad entre Octavio y Chapela, que no se enfrentan desde 1998
18 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Dani Hernández y Chema Cid tienen ganas de «pegarse en la pista» esta tarde, en palabras del primero -«¡entre comillas!», matiza entre risas-. Actuales jugadores de Octavio y Chapela, respectivamente, saben lo que es enfrentarse, pero nunca lo habían hecho tras ser compañeros en el Palma del Río, ni tampoco en un derbi gallego. Hoy (As Travesas, 18.00 horas) tendrán la primera oportunidad en el choque que cierra la primera vuelta de División de Honor Plata.
Amigos fuera de la pista, reconocen que esa circunstancia convierte al derbi en más especial para ellos. «Nos hemos encontrado muchas veces. Tuvimos un gran año de convivencia y amistad», explica Hernández. Cid incide en que es «muy bonito» volver a cruzarse y hacerlo en su tierra. Pero su hoy rival subraya que hay pros y contras: «Por una parte, tienes información de cómo es el jugador, qué jugadas le gustan, desde dónde lanza, sus fintas... Lo malo es que a él le pasa lo mismo contigo», comenta.
Saben que el Octavio es el favorito «por todo», resume Cid. «Está claro, tienen una plantilla hecha para Asobal y creo que lograrán el ascenso. Pero nosotros, con trabajo, lucha e ilusión, trataremos de salir a ganar. Nuestra obligación como recién ascendidos es sorprender allá donde vayamos», añade.
Hernández cree que la afición hará que el factor campo no sea tan determinante. «Va a venir mucha gente de Chapela, así que habrá muchos aficionados de ambos y todos muy motivados», advierte. Sobre la etiqueta de «favoritos», recuerda que la «arrastran» desde el principio de temporada, pero que «donde hayas estado el año pasado no da puntos y hay que salir a ganar sin pensar en la clasificación, que está muy igualada».
Ambos creen que la clave estará en las defensas. «Somos dos equipos que no corremos mucho ni tampoco hacemos muchos contraataques», señala Cid. Para su compañero, también será fundamental: «Los dos tenemos gente grande y fuerte en defensa. El que haga que el rival no llegue a 25 goles, gana».
Fiesta del balonmano gallego
Pese a que subrayan que son «dos puntos más», no niegan que es un choque diferente al resto. «Lo bonito es que el balonmano es un deporte grande en Galicia, que llegó a tener cuatro equipos en Asobal. Estos partidos tienen que ser una fiesta, porque casi todos nos conocemos y queda en casa», dice Cid, que también militó años atrás en el Octavio.
Sorprendidos por la expectación que ha generado partido, admiten que lo viven con ilusión. «Empieza la semana y ves que se habla de ello constantemente. Aunque no quieras, se crea un ambiente especial», cuenta Hernández.
Tanto el jugador del Chapela como el del Octavio alaban el trabajo realizado por el rival de hoy y también el propio. Pero ninguno quiere dejar pasar la oportunidad de cerrar la primera mitad de liga con victoria. Los vigueses podrían contar para ello con Edu Moledo, incorporación confirmada ayer.