Lavezzi: «Le tiré agua a Sabella porque lo vi demasiado nervioso»

EFE

DEPORTES

El jugador del PSG apunta como titular para el duelo de octavos ante Suiza

30 jun 2014 . Actualizado a las 16:44 h.

La frescura y la risa constante son características destacadas de Ezequiel Lavezzi, que con su estilo de juego como revulsivo intentará contagiar a la selección argentina, en su trascendental duelo de octavos de final ante Suiza del Mundial.

Luego de la lesión del Kun Agüero, el Pocho tendrá ante los helvéticos su primer partido como titular en el Mundial para flexibilizar el esquema táctico de la selección albiceleste con su entrega también a la hora de defender.

Dueño de un humor muy especial, es el gran bromista de la selección argentina y cobró notoriedad por tirarle agua al técnico Alejandro Sabella durante el encuentro ante Nigeria.

«Le tiré agua porque lo vi demasiado nervioso», esgrimió el Pocho sobre su reacción, que hizo recordar a cuando se sentó en el sillón del Papa durante la última visita del conjunto argentino al Vaticano cuando fue recibido por Francisco.

De origen humilde, el delantero nacido en la localidad santafesina de Villa Gobernador Gálvez, no oculta que en su juventud pasó hambre, luego de que su padre abandonara a su madre cuando apenas tenía 2 años.

Rechazado por Boca Juniors

Tras abandonar el colegio secundario en tercer año y no superar una prueba en Boca Juniors, el jovencito demostró su talento en el humilde club porteño de Estudiantes de Caseros, de la tercera categoría del fútbol argentino.

En las selecciones formativas de la selección argentina integró, junto a Lionel Messi, la plantilla que fue tercera en el Sudamericano Sub 20 de 2005 y luego fue campeona olímpica en Pekín 2008.

Por sus cualidades superlativas, el Génova de Italia compró su pase pero, sin actividad en Italia, lo cedió a San Lorenzo donde estuvo tres temporadas y obtuvo el torneo Clausura 2007.

Al finalizar ese exitoso año en el Ciclón argentino, retornó a la liga italiana para sellar su transferencia al Nápoles.

Tras cinco años se transformó en ídolo del legendario club donde brilló Diego Maradona en la década del '80, donde conquistó la Copa Italia en 2012.

En la recta final hacia el presente Mundial selló su pase al Paris Saint Germain donde conforma una delantera letal junto con el sueco Zlatan Ibrahimovic y el uruguayo Edison Cavani.

Tras cuatro títulos en el equipo de la capital francesa, el técnico portugués José Mourinho lo tiene en carpeta como un potencial refuerzo para el Chelsea inglés.

Con su cuerpo con 18 tatuajes y sus músculos marcados, el excéntrico jugador de 29 años ha generado una reciente revolución en Argentina, no por sus actuaciones dentro del campo de juego sino por el furor entre el público femenino.

Tras sus minutos ante Nigeria en la presente Copa del Mundo se creó una página de la red social Facebook con el nombre: «Movimiento para que el Pocho Lavezzi juegue sin camiseta», que ya reúne más de 340.000 Me gusta.

A tal punto llegó su instalación como sex symbol en la última semana que fue portada de todas las revistas del corazón y tanto él como su novia Yanina Screpante se transformaron en celebridades.