Afrontarán el Campeonato de España a finales de mes en Málaga
18 ago 2014 . Actualizado a las 06:57 h.Por segunda temporada consecutiva, Nuria Bouza (Lugo, 1989) y María Álvarez (Vigo, 1995) forman pareja en las competiciones de voley playa. Hace unos días, consiguieron la segunda posición en la cita del Madison Tour que se celebró en Tarragona. Y ahora ya piensan en la última parada del verano: el Campeonato de España. Asaltarán el cetro nacional el último fin de semana de agosto en Málaga.
Bouza y Álvarez compiten en la Superliga 1. La lucense acaba de fichar por el Haro, mientras que la viguesa continuará en el Alcobendas. Pero, fuera de la pista, han unido sus fuerzas en la modalidad de playa. La pasada campaña, dominaron las competiciones gallegas. Y su sueño incumplido es dar el salto a las citas continentales.
Uno de los problemas que se han topado para materializar sus aspiraciones es el económico. Es una situación generalizada en el mundo del deporte. «No podemos entrenar juntas, pero tenemos la suerte de que el Volei Praia Lugo ha apostado por nosotras y nos pagan los desplazamientos», relata Nuria Bouza.
Los pilares de una de las mejores parejas de voley playa nacional se cimentan en el apoyo de sus allegados. «Tenemos pasión por este deporte. Nuestro entrenador es mi tío Quico y nuestras familias nos ayudan en lo que pueden», comenta la jugadora lucense.
Rivales en la Superliga Femenina 1, Bouza y Álvarez se han convertido en inseparables en el circuito playero. La jugadora lucense explica cómo forjaron su alianza: «Lo principal es que las dos somos gallegas. Empezamos el año pasado y, cuando vimos que aquí ganábamos siempre, nos metimos en el Nacional». «La verdad es que no sé qué le vi -bromea-, pero en el primer torneo que participamos, nos proclamamos campeonas autonómicas», añade. «Eso es porque Nuria tiene nombre... Yo estaba por el medio», ironiza la viguesa.
En el Madison Tour, se han convertido en una de las parejas punteras del momento. Acumulan dos segundos puestos, un tercero y un séptimo. Este último, condicionado por la lesión que sufrió Bouza. Pero, a pesar de que los resultados acompañan, la lucense se muestra inconformista: «Ojalá pudiésemos participar en torneos de más nivel, pero no tenemos dinero para disputar un satélite o el Europeo. En España hay dos parejas de mucha calidad, pero lo demás se nos queda pequeño. Y necesitamos dar el salto, enfrentarnos con gente que nos gane bien para, de esta manera, aprender».
Retos
La pareja gallega estima que alcanzar las semifinales en el Campeonato de España supondría un buen resultado. Y, después, prepararán el regreso a la pista. «A los entrenadores no les suele gustar que se alternen ambos deportes, pero yo creo que viene bien. Lo malo es permanecer parada durante seis meses, porque después la pretemporada...», comenta Bouza.
La deportista lucense reconoce que le gusta «mucho más» el voley playa, «pero lo que me da de comer es la pista», matiza. Todo lo contrario que la viguesa, que asegura que se siente «más cómoda» en los pabellones. «Me canso mucho más en la playa», explica. «Es que es muy sufrido», asiente Bouza.
Por fortuna para ellas, les queda una larga trayectoria por delante. «A mí más», bromea María Álvarez, de 18 años. «La edad ideal para el voley playa son los 28 o los 30», agrega Bouza. En Málaga, intentarán alcanzar las posiciones de privilegio para seguir creciendo.
Nuria Bouza y María Álvarez Jugadoras de vóley playa