Los dirigentes de los principales deportes tienen nóminas por encima de la que percibe Rajoy
19 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.No solo la publicación de las retribuciones de algunos altos cargos de empresas y organismos vinculados a la administración pública ha provocado notables críticas. Desde hace tiempo que los deportistas españoles se muestran molestos por los abultados salarios de los dirigentes de las federaciones, que, pese a ser organismos privados, en la mayor parte de los casos, reciben cuantiosas subvenciones de los presupuestos generales del estado. Entre las suculentas remuneraciones se encuentra la del presidente de la federación española de baloncesto, José Luis Sáez, quien dispone de un sueldo anual de 181.374 euros, a los que este año además ha añadido un extra de 40.000 euros por la organización del Mundial que tuvo lugar en España durante el pasado verano y en la que la selección, dirigida por Orenga, vivió un sonoro fracaso. Los 221.374 euros que está previsto perciba en el 2014 sobrepasan, por ejemplo, lo que cobra el máximo responsable de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Ramón Aguirre, quien tiene una asignación en cada ejercicio de 210.000 euros, o lo que cobra el presidente de Navantia, José Manuel Revuelta, que ingresa anualmente 177.432 euros.
Otra de las nóminas que resaltan en el deporte español es la del presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, quien, según lo que recoge la página web del organismo, recibe 151.504 euros. Pero el máximo mandatario además ostenta otros cargos en organismo de relevancia internacional que podrían multiplicar sus ganancias. De todos modos, Villar ha estado en el punto de mira en numerosas ocasiones por la forma en la que ha gestionado la federación. Se le ha acusado de premiar la fidelidad de quienes le votaban a la hora de ser reelegido gracias a la adjudicación de créditos blandos para las territoriales que inclinaban la balanza a su favor. También se le achaca que renuncia a determinadas subvenciones que le corresponderían a la federación por el volumen de licencias que acredita, pero que le obligarían a pasar una auditoría externa, una circunstancia que podría dejar al descubierto las irregularidades que elección tras elección denunciaban sus opositores. Su sueldo duplica el del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para quien se destina una partida de 78.185 en las cuentas de Moncloa.
También por encima de Rajoy está José Luis Escañuela. Alcanzó la presidencia de la Federación Española de Tenis en un momento convulso, donde los jugadores estaban enfrentados con la federación porque consideraban que sus opiniones no se escuchaban. Hasta tal punto llegó la batalla de los tenistas con Pedro Muñoz, el anterior máximo mandatario, que incluso el capitán de la Davis, pagado y nombrado por la federación, Emilio Sánchez Vicario, tomó partido y se posicionó con los deportistas. El detonante de la guerra, la designación de Madrid como sede para albergar una eliminatoria de la Davis. En un principio, Escañuela consiguió enderezar el rumbo, pero su reciente apuesta por Gala León como recambio de Carlos Moyá en la capitanía del equipo español ha avivado las llamas del conflicto que parece lejos de reconducirse. José Luis Escañuela tiene un salario de 124.288 euros al año.
Las cifras, lejos de la realidad
Pero si llamativo es el volumen de las retribuciones de algunos altos cargos federativos también lo es la tenacidad en ocultar lo realmente perciben de forma anual. En determinados casos, se complementan los salarios con dietas que no aparecen reflejadas en las cuentas de las federaciones como un concepto ligado a los altos cargos, sino genérico, como, por ejemplo, dietas de representación. En otras ocasiones, los presidentes tienen varios cargos dentro de la misma federación y se les paga por ambos, con lo que, lo habitual es que perciban incluso más de lo que la cifras oficiales reflejan.