Serena Williams y Maria Sharapova disputarán la final femenina del Abierto de Australia
DEPORTES
La estadounidense seguirá como número uno tras la final del torneo
30 ene 2015 . Actualizado a las 15:31 h.La estadounidense Serena Williams y la rusa Maria Sharapova echaron mano de su mayor experiencia para apartar de su camino hacia la final a sus compatriotas Madison Keys y Ekaterina Makarova, respectivamente, y el sábado lucharán por el título del Abierto de Australia.
Al vencer Serena a Keys por 7-6 (5) y 6-2 a la novena bola de partido y con un saque directo de segundo servicio, la menor de las Williams continuará el lunes como número uno del mundo, y luchará por su sexta corona australiana. Maria, que derrotó a Makarova por 6-3 y 6-2, para alcanzar su décima final del Grand Slam y la cuarta en Melbourne, necesitaba ganar el título y que Serena perdiera este jueves para recuperar el trono.
«Mi confianza es alta en una final de un Grand Slam, no importa contra quien me enfrente, incluso si tengo un récord desastroso o no», señaló Maria desafiante, sin saber todavía quien sería su rival, al referirse a los casi once años que lleva sin ganar a Serena, con quien ha perdido 15 veces seguidas desde la final del torneo de Los Angeles en 2004.
Serena, con 18 Grand Slams en su historial, solo ha cedido dos veces contra Maria en 18 enfrentamientos, y entre sus victorias hay dos en el Abierto de Australia, las semifinales de 2005 y la final de 2007.
Las dos derrotadas, Madison y Ekaterina, saltaron a la Rod Laver Arena con vendajes en sus muslos después de semana y media de lucha, y pagaron con su inexperiencia el desafío de ganar a dos grandes como Serena y Sharapova, pero la rusa sale de Melbourne situada en la novena plaza y la estadounidense en la décimo tercera.
Sharapova, campeona en 2008, golpeó primero. A pesar de que los comienzos del duelo no fueron demasiado sencillos, pues necesitó diez minutos para hacerse con el primer juego del partido, salvando dos bolas de rotura, pero luego ganó seis consecutivos para ir minando poco a poco la confianza de su rival.
Makarova, décima favorita y verdugo de la rumana Simona Halep en semifinales, llevaba el muslo derecho vendado, aunque sin rasgos evidentes de lesión. El día, que amaneció con algo de viento y 21 grados, invitaba a la lucha y ambas se emplearon al máximo, con Maria gritando en inglés/americano y Ekaterina en ruso.
Sharapova dominó con autoridad para hacerse con el partido en 87 minutos, lograr la sexta victoria sobre su compatriota y avanzar por cuarta vez a la final, gracias a sus 23 golpes ganadores, 70 puntos por 49 de su rival y porque apretó más con el resto, rompiendo el servicio de Ekaterina en cuatro de las nueve ocasiones de que dispuso.
Sharapovoa ganó el título en 2008, pero cayó en las finales de 2007 y 2012. Este año inauguró el calendario con una victoria en el torneo de Brisbane, pero en Melbourne comenzó casi con despedida, pues tuvo que salvar dos bolas de partido, en la segunda ronda contra su compatriota Alexandra Panova. «Ha sido un extraño camino para llegar al a final, pero estoy feliz de estar aquí», dijo.
Luego, Serena aguantó los «mazazos» de derecha de la discípula de Lindsay Davenport, para imponerse en un desempate que dominó con su saque. Después se fue fácil hasta el 5-1, pero le costó mucho acabar ganando el sexto juego, porque Madison se defendió como gato panza arriba y salvó siete bolas de partido en el séptimo juego, que terminó ganando con su servicio, y otro más al resto al siguiente.
Serena apuró al máximo en su novena oportunidad y con un segundo saque anotó el decimotercer «ace» de su cuenta para cerrar un partido que le costaba firmar, porque Madison la desbordaba con su derecha cuando dominaba.
Al cruzarse en la red, Keys le ofreció la mano y Serena se fue a abrazarla. «Creo que ganará este torneo muy pronto y un montón de Grand Slams. Ha sido un honor para mi jugar contra alguien que será número uno en el futuro», dijo Serena, que al alcanzar su sexta final del Abierto de Australia se convirtió en la jugadora de mayor edad en hacerlo. Todavía con tos evidente, Serena comentó que se va recuperando. «Estoy mucho mejor, cada día mejorando. Ojalá que para el sábado esté recuperada», dijo la ganadora, que a pesar de ese malestar conectó un saque a 200 kilómetros por hora.
Esa final será la octava entre una rusa y una estadounidense luchando por el título en el primer grande de la temporada. El tenis USA domina por 6-1 y todas han sido a dos sets. Sharapova lucha contra ese desafío.