La resolución de su caso por dopaje lleva parada en el TAS más de cuatro meses
31 oct 2015 . Actualizado a las 15:59 h.A finales de junio, días después de que en el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) terminase la vista sobre el caso de Marta Domínguez, la atleta española más laureada de todos los tiempos y para la que la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) solicita cuatro años de suspensión por valores anómalos en su pasaporte biológico, fuentes próximas al tribunal suizo aseguraban que en aproximadamente dos meses emergería el laudo de la máxima instancia en la jurisdicción deportiva. Pero ya se ha consumido el doble de tiempo y, por el momento, nada. Las dudas crecen entorno a un asunto clave en la imagen de la actual senadora del Partido Popular y que resultó salpicada por la operación Puerto y la Galgo, en la que la Guardia Civil llegó a registrar su domicilio. Las preguntas se multiplican en torno a una figura que había estado en el pedestal más alto del deporte en España.
¿Es habitual esta demora en la resolución del caso?
No. El plazo de dos meses que se indicó desde el TAS no era aleatorio. Después de que se produzca la vista, es decir, que se escuche a las dos partes, es el tiempo de respuesta más común del alto tribunal del deporte para emitir sus laudos. Un caso similar al de Marta Domínguez lo vivió Alberto Contador, también absuelto por la federación española -de ciclismo- y cuya absolución fue objeto de recurso al TAS por parte de la internacional. La UCI y la AMA elevaron el positivo de Contador al tribunal suizo a finales de marzo del 2011. La vista fue la última semana de noviembre de ese mismo año y el dictamen del TAS, imponiendo una sanción de dos años al ciclista de Pinto, vio la luz el 6 de febrero del 2013. Poco más de dos meses después de la vista.
¿Qué habría motivado este retraso en el caso de la atleta palentina?
Una de las hipótesis más plausibles es que la estrategia dilatoria de su abogado, el exciclista José Rodríguez, quien también defendió a Contador esté dando sus frutos. Al mismo tiempo que la IAAF y la AMA recurrían al TAS en abril del 2014 por la absolución de Marta Domínguez por parte del Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Atletismo, Rodríguez, en representación de la deportista, interpuso una demanda en el Juzgado Número 7 de Palencia para solicitar que se prohibiese a la federación española y a la IAAF el uso de los valores hematológicos de sus análisis de sangre, los mismos que figuran en su pasaporte biológico y que habían servido como base para dictaminar que había alteraciones notables debidas, para los expertos antidopaje de la IAAF, al uso de sustancias prohibidas.
La demanda fue admitida a trámite y, poco después, el juez dictó medidas cautelares encaminadas a preservar el honor de la deportista -ese, en realidad, es el fondo del recurso presentado por José Rodríguez- , por lo tanto, prohibía a la IAAF y a la federación española la utilización de los datos de sus análisis de sangre. Lo cual podría no solo estar retrasando ahora el laudo, sino que habría retrasado ya el proceso antes de la vista, pues esta tardó en fijarse un año y dos meses por los ocho de la de Contador.
¿Puede el TAS emitir su laudo con esta prohibición de la justicia española?
Sí. Hasta ahora, la justicia deportiva, cuya máxima instancia es el TAS y la justicia ordinaria han sido vías paralelas. Pero eso, según recalcan fuentes jurídicas consultadas por La Voz, no quiere decir que el TAS no sea sensible a lo que la justicia de un determinado país manifieste sobre un caso sobre el que está deliberando. Especialmente relevante en este sentido resulta el caso de la patinadora alemana Claudia Pechstein, cinco veces campeona olímpica, que fue sancionada en el 2009 por la federación internacional de patinaje (ISU) con una suspensión de dos años por valores anómalos en un control sanguíneo.
Pechstein recurrió al TAS y este no le dio la razón. En enero la Corte de Apelación de Múnich admitió a trámite una demanda de la patinadora contra la ISU y en su fallo dijo «no reconocer la decisión del TAS». Para el tribunal suizo, de prosperar esta demanda, «los principios básicos del arbitraje internacional podrían verse comprometidos».
¿Resolverá pronto el juzgado de Palencia sobre la demanda de la senadora?
La prohibición de hacer uso de los datos que aparecen en el pasaporte biológico de Marta Domínguez puede tener los días contados. Según publicaba la semana pasada El Norte de Castilla, el titular del Juzgado de Instrucción Número 7 de Palencia fijó para el 25 de noviembre la vista oral para confirmar si se vulneró el derecho al honor de Marta Domínguez o si no hay fundamentos jurídicos suficientes para que no puedan utilizarse sus registros hematológicos.
Cabe la posibilidad que el TAS haya decidido esperar a conocer el resultado de esa vista oral antes de emitir su laudo.
¿Podría haber presiones políticas para retrasar el dictamen del TAS?
En principio, el TAS goza de una reputación de independencia que en pocas ocasiones se ha puesto en cuestión. Sus decisiones apenas son discutidas.
Pero también es cierto que las relaciones de Marta Domínguez a nivel político son al máximo nivel. Fue el propio Mariano Rajoy, cuando todavía era líder de la oposición, quien avaló su aterrizaje en la política como senadora por Palencia. Y, dicen quienes conocen cómo se maneja la deportista, que todo lo relativo a su caso lo ha tratado personalmente con el propio Rajoy. Un castigo entre dos y cuatro años y la retirada de sus títulos de campeona del mundo de 3.000 obstáculos del 2009 y la plata europea en la misma distancia y especialidad un año más tarde en Barcelona no solo sería un duro golpe a la estima de la que es considerada mejor atleta española de todos los tiempos, sino a un icono del PP. Justo ahora, a un paso de las elecciones generales. Una foto que nadie querría tener.