El central del Barça ha querido zanjar la polémica centrándose en el mundialito en el que debutan mañana
16 dic 2015 . Actualizado a las 16:17 h.El jugador del FC Barcelona Gerard Piqué aseguró este miércoles que «no» insultó a Álvaro Arbeloa y entendió la defensa de Sergio Ramos a su compañero de equipo en este asunto porque actuó como «capitán del Real Madrid». «No tengo nada más que decir, yo no le insulté. Dije que Arbeloa no era un amigo, sino un conocido, cada uno interpreta lo que quiere», zanjó Piqué en rueda de prensa desde Japón previa al debut del equipo en el Mundial de Clubes este jueves ante el Guangzhou chino.
El pasado sábado, tras el partido ante el Deportivo de La Coruña, el central catalán indicó que Arbeloa, que había ironizado días antes diciendo que el azulgrana «era un amigo» al que algún día vería actuando «en el Club de la Comedia», no era un amigo sino un «conocido», repitiendo después esta palabra, haciendo la pausa entre «cono (mote despectivo con el que se conoce al lateral) y cido». «El papel de Sergio Ramos es el normal de un capitán. Como capitán del Real Madrid defiende a Arbeloa, es su compañero y es normal que lo haga. Yo también lo admiro, lo digo en serio», prosiguió el internacional.
Sobre la respuesta de Esteban Granero, exjugador del Real Madrid, tras sus palabras, recordó que ya no le sorprende «nada». «Cada uno que haga lo que le dé la gana. Pero estamos aquí pensando en el Mundial, que jugamos como campeones de Europa», subrayó.
Piqué, por favor, olvida ya los complejos y respeta a tus superiores. pic.twitter.com/3bDZl4RI63
? Esteban Granero (@eGranero11) diciembre 12, 2015Al 3 culé también se le preguntó por lo que colgó en la red social Twitter el exmadridista Esteban Granero, que escribió: «Piqué, por favor, olvida ya los complejos y respeta a tus superiores». «No me sorprende nada ya en este mundo. No voy a responderle. Estamos aquí para jugar el «mundialito» porque ganamos la Champions. Lo que no puedo hacer es controlar lo que dice todo el mundo», zanjó el central.
Preguntado por las expectativas del club en el torneo que se disputa en Japón fue tajante; «obviamente es ganar, porque es una competición muy prestigiosa». Admitió que sobre el rival de mañana, el Guangzhou chino que entrena el brasileño Luiz Felipe Scolari, el equipo sabe poco, solo lo que han «estudiado estos días».
El catalán destacó que se trata de un equipo «peligroso al contraataque y con brasileños de calidad». «Esperemos que hagan el menor daño posible», recalcó. El defensor recordó también que el «jetlag», dada la enorme diferencia horaria de Japón con respecto a España (ocho horas), es «algo a tener en cuenta». «Obviamente no es una excusa, pero es un viaje largo y duro (hasta Japón) y el proceso (de adaptación al horario local) es de varios días».