«Se nos ha atragantado la zona impuesta por Melilla», reconocía Lisardo Gomez en la rueda posterior al partido. El técnico del Breogán lamentaba las vicisitudes por las que su equipo había pasado ya antes de iniciarse el encuentro: «Matulionis tenía dolor de espalda y Mamadou sufría un proceso febril. Nos ha ido mal desde el calentamiento y así es muy complicado enfrentarse a Melilla, un equipo ante el que tienes que estar al 100%». «Contento» con el trabajo defensivo de su equipo, lamentaba que «nos han penalizado mucho los dos malos minutos que hemos tenido al final del segundo cuarto». Reconocía el técnico que «hemos salido muy fríos en el tercero, Melilla ha salido mejor que nosotros y ha conseguido abrir una brecha de 19 puntos», valoraba.