El técnico gallego regresa al club en el que llegó por primera vez en mayo del 2014 donde ya es por méritos propios una auténtica leyenda
19 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Su primer aterrizaje en el Al Nassr en mayo del 2014 desató la locura de la afición. Al aeropuerto de Riad, la capital de Arabia Saudí, lo fueron a recibir cientos de aficionados. La huella que había dejado en el fútbol de oriente próximo Raúl Caneda (O Grove, 1969) todavía era notable. Con el Al-Ittihad había roto los moldes del juego directo, había conseguido exportar a esa región el gusto por el toque, por la elaboración. Y bajo estas directrices, lució en la Champions asiática.
Y consiguió repetir la hazaña de que el Al Nassr se desplegase de forma exquisita por el terreno de juego. Y no solo eso. La brillantez venía acompañada de resultados. Era líder. Pero en noviembre, de manera sorpresiva cesó en su cargo. Sin demasiadas explicaciones por parte de la cúpula del club, regresó a Galicia. Le salieron oportunidades de entrenar en Europa, pero no acabaron cuajando.
Y ahora, desde Londres, donde reside, regresa al Al Nassr hasta final de temporada. Nuevos desafíos en una punto del planeta donde ya es por méritos propios una auténtica leyenda.