Ilias Fifa y Abel Mechaal, marroquíes de nacimiento, oro y plata en el 5.000
12 jul 2016 . Actualizado a las 08:33 h.Ilias Fifa llegó a España en los bajos de un camión con 16 años. Adel Mechaal vive en Barcelona desde los seis, cuando su padre fue contratado para trabajar en la construcción en los meses previos a los Juegos Olímpicos. Los dos nacieron en Marruecos y ayer le dieron un doblete a España en los 5.000 metros en la prueba más igualada de la distancia que se recuerda de una carrera de fondo. Hasta el punto de que los tres primeros firmaron el mismo tiempo: 13m 40s 85c.
Los dos representan una historia de superación. El nuevo campeón de Europa, que aprovechó su portentoso final para firmar una remontada de época haciéndose sitio en la línea de meta a trompicones, no lo ha tenido fácil. Llegó con 16 años, paseó varios centros de inmigración (su familia sigue viviendo en Marruecos) y trabajó en una empresa de limpieza de aparcamientos a media jornada. De un modo paralelo comenzó a entrenar con la Agrupació Atletica Catalunya hasta que lo fichó el Barça.
En Ámsterdam confirmó su excelente final. Ilias se mantuvo siempre en el grupo de cabeza, pero sin gobernar la carrera, pero en los últimos tiempos se había aplicado en la lección táctica y ayer aprobó el examen con nota. Aguantó el cambio de ritmo final de su compañero Mechaal, pero no se cegó, sino que en un carrera sucia y con muchos empujones, supo esperar a la última recta para colarse entre todos y llevarse el triunfo con su Adel por los suelos. «Soy el rey de Europa», proclamó.
Porque a falta de 200 metros era su compañero de selección en gran candidato al oro. Por controlar la carrera y por apuntar un excelente punto de forma camino de los Juegos Olímpicos en donde quiere retar a Mo Farah. Abel siempre ha sido peleón, relacionado con el nacionalismo catalán y que durante años se ganó la vida como conserje de un recinto deportivo. Pero al fin ha podido acceder al atletismo profesional, con concentraciones en altura en Font Romeu (Francia), y los resultados no han tardado en llegar. La plata de ayer no le sabe bien del todo cuando ya acariciaba el oro, pero es un excelente refrendo para un atleta que ya había sido medallista continental en cros.
Fifa y Mechaal, que se fundieron en un abrazo al conocer los resultados oficiales, volverán a verse las caras en el 5.000 de Río, en donde los dos quieren plaza de finalista.
España sumó ocho medallas y acaba sexta en el medallero
El atletismo español recuperó en parte la sonrisa en el Europeo de Ámsterdam. Las ocho medallas, tres de ellas de oro y la irrupción de nuevas disciplinas dibujan un alentador panorama para una disciplina que no acababa de salir de la crisis en los últimos años. El sexto puesto en un medallero dominado por Polonia parecen un buen punto de arranque para la recuperación.
España vuelve a casa con tres oros. El más inesperado, el conseguido por Bruno Hortelano en los 200 metros después de una gran remontada. Ruth Beitia no faltó a su cita y volvió a demostrar que es la baza más segura del atletismo español. El triángulo de oro lo completó ayer Fifa en los 5.000 metros.
Entre las cuatro platas se incluye la conseguida ayer por el equipo de media maratón en la modalidad por equipos. Carles Castillejo, Jesús España y Ayad Lamdassen completaron una buena prueba (octavo, décimo y duodécimo) y tan solo perdieron el oro por dos segundos. Se lo arrebató Suiza.
David Bustos devolvió al podio al 1.500, la carrera más laureada del atletismo en pista español, que pasaba por una profunda crisis. Y a su lado han emergido los Sergio Fernández en los 400 vallas y Mechaal en los 5.000 metros. La cosecha española se completa con el bronce de Toni Abadía en los 10.000 metros en una carrera inteligente y con un buen final.
Alessandra, vigesimoséptima
En cuanto a la representación gallega, tan solo Solange Pereira alcanzó plaza de finalista entre los siete participantes.
El último día también fue el turno de Alessandra Aguilar en la media maratón. La lucense fue de más a menos y acabó vigésimo octava con 01h 13m 28s.