Alonso rodó en el décimo puesto hasta el abandono a tres vueltas del final
27 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.No podía faltar la rajada de Alonso sobre su equipo tras una carrera en la que, esta vez, ha estado a punto de hacer un milagro en forma de décimo puesto. Esa es la aspiración que tiene McLaren a día de hoy, y eso que en Australia fue una carrera que, por sus circunstancias y características, pudieron aspirar a ello, ya que en palabras del asturiano «en circuitos normales nuestra posición será más retrasada».
Para Fernando Alonso la de ayer, en contexto, ha sido la mejor carrera de su vida hasta ese momento. Y lo explicaba con un duro palo hacia el trabajo de su escudería en general, no solo de Honda. «Pocas veces he tenido un coche tan poco competitivo como en esta carrera. Sin hacer preparación invernal, teniendo que salvar gasolina de manera masiva, casi un segundo por vuelta levantando el pie. Aun así estábamos en los puntos, lo que era una sorpresa bastante grande, aunque al final no se pudo completar», destacó el piloto español. El incidente, una suspensión rota, le dejó fuera de los puntos que había rondado durante casi toda la prueba.
Ahora es trabajo de la escudería McLaren ponerse las pilas. «Nos sacan a final de recta 10 kilómetros por hora porque tenemos poca ala, pero en mitad de recta nos sacan 30 ó 35. Pocas veces se repetirá este fin de semana, decimotercero en la crono, meternos en la Q2 y ahora en carrera estar en los puntos. En las próximas carreras va a ser prácticamente imposible», prevé el asturiano. «McLaren tiene que encontrar algo lo antes posible, porque de lo contrario Stoffel y yo haremos todo lo posible, pero será difícil puntuar», advierte el bicampéon del mundo. Su compañero Vandoorne sí consiguió acabar la carrera, pero en el último lugar.
Ayer desde Australia, el expiloto de fórmula 1 y amigo personal de Alonso Mark Webber indicó que «es posible que Fernando no acabe la temporada, está frustrado como el infierno».
Quejas de Carlos Sainz
Por su parte, Carlos Sainz acusó a su equipo de hacerle perder tiempo. El español logró su mejor resultado en Australia, pero no estaba contento. El octavo puesto le sabe a poco al madrileño, que responsabiliza directamente a sus jefes de haberle hecho perder varios segundos por dejar adelantar a un Kvyat que, justo después, tuvo que entrar a boxes para cambiar neumáticos. «He tenido que dejar pasar a mi compañero porque me lo ha pedido el equipo, pero ha tenido que parar. Al final ese séptimo se ha escapado por poco. He perdido 5 o 7 segundos de carrera por haber tenido que dejarle pasar y no sé si Pérez hubiese estado más cerca, pero la conclusión es aprender para ver qué ha podido pasar ahí», destacó, con rostro serio. «Octavo no está mal para empezar el año», terció finalmente para restar dramatismo a sus quejas hacia la escudería.