Eugenio Martínez Bravo, cabeza visible de Compromiso Blanco, acusa a Florentino de enviar un mensaje incorrecto acerca de la deuda del club blanco
12 mar 2018 . Actualizado a las 09:28 h.Florentino Pérez ya tiene quién le diga las verdades. Eugenio Martínez Bravo, socio crítico del Real Madrid, se ha establecido como objetivo acabar con las maniobras contables y la desinformación de la que hace gala el actual presidente del club blanco.
Martínez Bravo, uno de los referentes en ámbitos directivos en firmas de comunicación de nivel internacional, goza de gran prestigio en el sector y es uno de los críticos más activos con respecto a la gestión de Florentino Pérez. De hecho, es la cabeza visible de Compromiso Blanco, que engloba a los grupos opositores Plataforma Blanca (del que Bravo era presidente y que fue uno de los azotes de Ramón Calderón hasta que abandonó la presidencia madridista tras una nefasta gestión), 6 de marzo de 1902, Movimiento Ámbar, Socios del Real Madrid y Valores del Madridismo, entre otras.
Eugenio Martínez Bravo ha denunciado que, según la última Memoria Anual a 30 de junio del 2017 el pasivo financiero (la deuda bancaria total más la correspondiente a los acreedores comerciales) es de 447 millones de euros, sobre un pasivo del balance de 611 millones. Martínez Bravo incide en que Florentino Pérez nunca ha mencionado estas cifras, sino que ofrece una versión tergiversada de la realidad económica del club, aludiendo siempre a la facturación y a la deuda neta (la deuda bruta menos la caja).
Idea tergiversada
Eugenio Martínez Bravo insiste en que el club siempre ha transmitido la idea de la que la deuda es baja. «Si el ratio Ebitda es bajo es porque los niveles de explotación también lo son y esas cifras que da el club son tan inferiores a los 447 millones mencionados porque solo toman la deuda bancaria, y encima le restan la caja, de unos noventa millones de euros», analiza antes de apuntar: «Pero ese mensaje está completamente dirigido, no es correcto, porque la obligación es hablar de la deuda total, es decir, la que se tiene con los bancos, los proveedores, los demás acreedores...».
«Para colmo, la mayoría de la deuda es a corto plazo, y no se pueden financiar de este modo los activos a largo plazo», concluye el impulsor de Plataforma Blanca. Dicho esto, Martínez Bravo sentencia: «El Real Madrid tiene unos límites de endeudamiento importantes, y está teniendo por ello un riesgo grave de viabilidad por no encontrar financiación». «La burbuja del fútbol se pincha y el riesgo es altísimo», insiste.
Asegura que los socios desconocen la realidad económica del club, «porque Florentino Pérez ha teledirigido una asamblea dominada por él mismo». «La etapa del actual presidente está completamente agotada. La solución a la ingente deuda pasa por la salida de Florentino Pérez del Real Madrid. Ha estado dando señales de agotamiento muy peligrosas», añade.
Para el futuro inmediato, Martínez Bravo propone, por un lado, un referendo destinado a los socios. «Florentino Pérez siempre dice que son los auténticos propietarios del club... pues pregúntenos qué club queremos, en lo económico y en lo deportivo», apunta.
Además, sugiere la necesidad de «realizar una gestión diferente, comenzando por la valoración de activos y un plan estratégico a largo plazo, y no tan cortoplacista como el de Florentino Pérez».
«Vender el nombre del estadio no va a solucionar el riesgo de viabilidad por falta de financiación»
El impulsor del movimiento más crítico con los presidentes del Real Madrid en la última década ha dado la voz de alarma sobre la grave situación que puede llevar al club la remodelación del estadio Santiago Bernabéu, cifrada en 400 millones de euros.
«La realidad es que Florentino Pérez está encontrando muchos problemas para encontrar financiación para ese proyecto, cuando en su momento lo vendió con mucha confianza como una operación económicamente sencilla para el club, y lo hizo sin haber garantizado el dinero antes. De hecho, no lo tiene garantizado ni ahora», describe el socio madridista y opositor a la presidencia actual.
«Todas las operadoras de televisión ya están cuestionando desde hace tiempo la hiperinflación de los derechos del fútbol», advierte. Asimismo, insiste que «los derechos de televisión son menos de un tercio de los ingresos y el presupuesto de facturación, que no es para nada real, es de unos 700 millones de euros».
«Vender el nombre del estadio no va a solucionar el riesgo de viabilidad por falta de financiación», lamenta Eugenio Martínez Bravo. «Como mucho, paliará la situación en una menor medida», matiza. «Por si fuese poco, el Bernabéu no aumentará su capacidad y las familias seguirán rotas en el disfrute del fútbol, obligando a sus miembros a sentarse en localidades separadas», añade.