Tras ausentarse de forma repentina en Montreal, se reincorpora con muchos frentes por cerrar por el exceso de jugadores
16 jul 2019 . Actualizado a las 21:01 h.El entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, volvió a incorporarse a la concentración del club blanco tras el repentino fallecimiento de su hermano Farid. El entrenador blanco regresó a América tras viajar el pasado viernes hasta Europa a causa del grave estado de su hermano.
A última hora del lunes, el entrenador francés se reencontró con la plantilla, su cuerpo técnico y los directivos del Real Madrid que han viajado hasta Canadá, para tratar de terminar de confeccionar la plantilla de cara a la temporada 2019-2020, con un exceso de jugadores que debe aligerar.
Muchos son los frentes abiertos con los que tiene que lidiar el francés desde ahora hasta final de la pretemporada. El primer caso se encuentra en el amparo de la portería del Santiago Bernabéu. Keylor Navas y Thibaut Courtois se disputan la titularidad en una de las decisiones más trascendentes que tiene en mente Zidane. Tanto el tico como el belga ofrecen garantías bajo palos y es Zizou quien tiene que decidir como acabará esta sana disputa.
En el medio del campo con el trivote de Modric, Kroos y Casemiro fijo en su puesto, solo quedan por solucionar las situaciones de Isco y Dani Ceballos. La marcha del jugador de la sub-21 está a expensas del fichaje del actual jugador del Manchester United, Paul Pogba. Es conocido que Ceballos no es del agrado de Zidane y sería el primero en salir si la llegada del campeón del mundo se hiciese efectiva. El otro andaluz en la rampa de salida es Isco, que no contó con los minutos ni el protagonismo que él quería la pasada temporada. Su rol en la plantilla no le convence y Zidane tiene la clara idea de alinear al trivote que tantas alegrías le ha dado. Una buena oferta por el malagueño haría a los técnicos y directivos del Madrid meditar la salida del mediapunta.
En la delantera, nombres propios como el de Bale, Brahim, Lucas Vázquez, James o Asensio son los que baraja el cuerpo técnico del Real Madrid para cerrar definitivamente la plantilla. El caso que más da de que hablar es el de Gareth Bale. El galés se resiste a salir mientras que el club blanco busca un complicado traspaso por las cifras del mismo. Lucas Vázquez y Marco Asensio son los que más papeletas tienen para quedarse. No es el caso de Brahim, que tras su lesión en el bíceps femoral que lo mantendrá alejado del césped cerca de un mes, no va a poder luchar por un puesto en la plantilla y su salida como cedido se pone en cabeza. James, con su marcha casi fija del club, es la ultima pieza del rompecabezas que tiene que solucionar Zidane. El Bayern será el primer rival para analizar la situación de sus jugadores.