«Me dijeron que iban a buscar mi dirección para venir a partirme las piernas», denuncia la futbolista tras negarse a participar en el minuto de silencio en memoria del Pelusa antes del amistoso entre el Deportivo Abanca y el Viajes Interrías
01 dic 2020 . Actualizado a las 13:07 h.Mientras medio mundo vive conmocionado y en medio de homenajes a Diego Armando Maradona, Paula Dapena decidió mostrar su disconformidad. En el minuto de silencio que se guardó ayer en memoria del Pelusa antes del amistoso entre el Deportivo Abanca y el Viajes Interrías, equipo de Paula, ella decidió dar la espalda y sentarse en el suelo. La imagen corrió como la pólvora. «Me enteré de que había que hacer el minuto de silencio cuando íbamos en el bus al campo. En ese momento ya dije que no lo iba a hacer. Ya en el campo, lo primero que se me pasó por la cabeza fue sentarme en el suelo y dar la espalda». Ese gesto revolucionó a todos los seguidores del astro argentino.
Sus compañeras la miraban, «ellas no creían que fuese capaz de hacerlo y al final tampoco supieron como reaccionar», recuerda. Hasta Manu Sánchez, técnico del conjunto blanquiazul, se acercó a ella en el descanso para preguntarle por qué lo había hecho «y me felicitó por el gesto».
Cuando la imagen del momento se hizo pública, las redes sociales de Dapena comenzaron a echar humo en forma de reacciones. En un principio todo fueron mensajes de apoyo y cariño, pero cuando la imagen cruzó el charco y llegó a Argentina la cosa cambió. «Se duplicaron los mensajes de odio y amenazas de muerte. Me dijeron que iban a buscar mi dirección para venir a partirme las piernas», relata Paula. Pero no solo a ella. También sus amigas y compañeras de equipo fueron objeto de amenazas.
La futbolista pontevedresa no niega la calidad de Maradona. «Tenía unas habilidades espectaculares y a pocos futbolistas se les puede comparar con él, pero personalmente creo que un deportista tiene que ser algo más que esas habilidades dentro del campo y tener unos principios y valores como personas, sobre todo si es un ídolo y un referente de mucha gente», justifica.
Aunque es consciente de que su gesto, inocente aunque reivindicativo, «es normal que no guste a todo el mundo», Paula Dapena considera que no ha sido irrespetuosa. «Podía haber gritado o haber parado el minuto de silencio. Simplemente decidí darle la espalda a ese homenaje. De ahí a llegar a amenazarme… es que he recibido cosas muy fuertes», comenta.
Todo lo sucedido en las últimas horas le está haciendo plantearse denunciar a todos aquellos que le han lanzado amenazas. Tanto sus amigas como sus compañeras de equipo han puesto privados sus perfiles en redes sociales para evitar ese tipo de mensajes. «Me estoy planteando denunciar a muchas personas, pero probablemente sea muy difícil que lleguen a algo, pero por lo menos conseguir que paren». Aún asi, Paula reivindica lo que hizo y no se arrepiente. Cuenta con el apoyo de su entorno y de mucha gente que se pone en contacto con ella. «No es todo malo, también hay gente muy amable que me está mandando mensajes todo el rato», finaliza.